En la primera revolución industrial, el avance tecnológico se notaba en las herramientas que permitieron fortalecer a las empresas y las industrias. Pero este concepto ha cambiado con los siglos. Hoy, más que un instrumento, la tecnología es un elemento clave que trae consigo cambios trascendentales en los mercados, en la producción y en la logística. El termino “disruptivo” fue acuñado por Clayton Christensen en 1995 en un artículo que denominó: ‘Disruptive Technologies: Catching the Wave’, en este, el calificativo explicaba cómo las tecnologías que conducen a la aparición de productos y servicios pueden afectar a las empresas dominantes. Aquí, cabe desta- car innovaciones que a su vez crean nuevos mercados a costa de los ya existentes. Hay muchos ejemplos de tecnologías disruptivas, dos de los más recientes son Netflix y Spotify. Estas empresas transformaron el mercado de la música y de la televisión a nivel global. Una cuestión que no supo resolver a tiempo la industria fotográfica liderada por Kodak que, en su momento, no le dio importancia al mundo digital y en pocos años se vio desplazada; tanto que prácticamente desapareció del mercado. En la industria del transporte y la logística han empezado a surgir estas tecnologías disruptivas y muchas presentan amenazas significativas a los modelos de negocio tradicionales en estos sectores. Si los sectores portuario y logístico no les prestan la debida atención a estas innovaciones, verán afectada su competitividad de manera trascendental. Le puede intersar: De lo gratis al o pago, el triunfo del modelo de suscripción. La principal tecnología disruptiva que está permeando al transporte es el crecimiento del comercio electrónico. De hecho, cualquier modelo comercial tradicional que utilice tiendas físicas para vender al por menor, o cualquier centro de distribución que opere al estilo de zonas libres, está afectado por esta nueva manera de compra y venta. Amazon, la compañía estadounidense de ventas online, vendió 70 billones de dólares en América Latina en 2017. Sus productos llegaron al consumidor final por canales de distribución y transporte muy diferentes a los tradicionales, porque una característica típica del comercio electrónico es que los paquetes son pequeños y utilizan el envío por avión (o drones). La segunda tecnología disruptiva, que igualmente está asociada a la capacidad de almacenaje de datos y a las innovaciones en telecomunicaciones, es el uso de Big Data Analytics, Inteligencia Artificial y Machine Learning. En el mundo de la logística el objetivo es minimizar costos e inventarios, optimizar el uso de los recursos y garantizar la entrega eficiente y eficaz de la carga, y Big Data Analytics es una herramienta fundamental para el logro de esos objetivos. Finalmente, la innovación que en un futuro cercano puede tener más impacto es el blockchain, que viene junto a la transformación digital de la cadena de valor. El nuevo modelo digital conlleva la eliminación de todos los trámites que en la actualidad se hacen en papel, y la utilización de blockchain se refiere a todas las transacciones que se realizan como parte de la cadena de suministros, desde la contratación de transporte, hasta el recibo y pago conforme de la mercancía. En resumen, tanto los puertos como las zonas logísticas deben estar atentos a estas tecnologías disruptivas. Con el fin de diferenciarse y fortalecer las ventajas competitivas, se debe dar un salto cuantitativo y cualitativo que permita desarrollar las plataformas tecnológicas y los procesos, y de esta forma ponerse a la par de los mejores en el mundo. *Investigador de la Universidad de Panamá.