Los pasos de los 3.000 corredores resonaban en el adoquín ante la imponente presencia de las grúas pórtico, que pocas horas antes habían terminado su última jornada del día, movilizando los contenedores en el MSC Carlotta, que partía hacia Hamburgo cargado de productos colombianos. Un sol color naranja se asomaba al amanecer detrás de la última grúa. Les daba la bienvenida a los atletas provenientes de todos los rincones del país que iniciaban su camino en la primera Media Maratón del Mar, que se realizó el pasado 21 de octubre en la capital de Bolívar y partía del Puerto de Cartagena. Los competidores participarían en carreras de 5, 10 y 21 kilómetros; 1.800 de ellos formaron parte de esta última categoría. El pito del remolcador marcó el inicio de la prueba y despertó, de paso, a toda la ciudad. Al pasar por un túnel de contenedores de todos los colores, un corredor decía exaltado “¡viva Colombia!”, acompañado por el resto de compatriotas que gritaban de emoción, de alegría y hacían su mejor esfuerzo. Para muchos de ellos este era el inicio de alguna promesa, de algún sueño, o el final de muchos días de disciplinado entrenamiento. ¿Por qué corrían? Por su salud, por pasión o para comprobar los límites de su resistencia. Un ejemplo de esto son los integrantes del Team Caro Wagner y el Team Broth3rs. Ellos iniciaron la carrera en el Grupo Elite, se adelantaron un poco y los otros corredores les rindieron un homenaje con aplausos de admiración y respeto. En el Team Caro Wagner corrían el papá, Óscar Caro, que empujaba la silla de ruedas de su hijo Luis David, quien nació con parálisis cerebral; juntos han participado en varias competiciones similares. “Nunca me imaginé que Luis David me traería tanta felicidad”, diría el orgulloso padre al terminar la carrera, mientras miraba la medalla que colgaba del cuello de su hijo. El Team Broth3rs tiene una historia similar. Comenzaron a correr juntos hace poco. Son tres hermanos, uno de ellos va en silla de ruedas, y los otros dos se alternan para empujarlo, en medio de la complicidad y las sonrisas. También le puede interesar: Así se preparó el puerto para la visita del papa Todos estos sueños empezaron a tejerse desde el inicio del día en el Puerto de Cartagena, uno de los lugares emblemáticos de la ciudad. Aquí fue la misa del papa Francisco, en estos muelles se celebra el concierto más concurrido del Cartagena Festival Internacional de Música (más sobre este evento en la página 116) y se han llevado a cabo cuatro Sail Cartagena de Indias, el más reciente en junio de 2018. Pero sin duda, el sueño más grande fue el de tres cartageneros que decidieron hace más de un año posicionar a Cartagena como una de las carreras más importantes del país, la Media Maratón del Mar. Una muestra más de lo significativo que es este espacio para los cartageneros y los colombianos. Seguro que esta carrera se convertirá en una de las más importantes del país, ninguna otra puede ofrecer una ruta similar, entre construcciones históricas coloniales, entre las murallas, a la orilla del mar y partiendo de un ícono, el puerto, que cada día corre su propia maratón para ayudar al desarrollo del país. *Coordinadora de Mercadeo y Comunicaciones del Grupo Puerto de Cartagena.