Su objetivo principal es la atención y protección de la infancia y su misión se centra en promover la solidaridad de las personas para que las familias y poblaciones que sufren de pobreza, exclusión y desigualdad desarrollen capacidades para conseguir sus aspiraciones de vida digna de modo sostenible. Con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), en Norte de Santander implementa un proyecto de ayuda humanitaria y atención a población migrante y retornada de Venezuela que consiste en brindar información, hidratación, kits de higiene y alimentarios en puntos ubicados en los municipios de Villa del Rosario y Los Patios; así mismo, almuerzos diarios en comedores comunitarios ubicados en el barrio José Bernal y el Centro de Atención al Migrante en Cúcuta. Complementariamente, promueve actividades de integración cultural para mejorar la convivencia entre esta población y las comunidades receptoras. Lea también: Los hijos de la migración venezolana En el punto de atención de Los Patios, se cuenta con un espacio protector para niños, niñas y madres gestantes y lactantes en el que se realizan actividades lúdicas y charlas de prevención frente a los riesgos que se pueden presentar en el camino; por ejemplo temas de salud, comportamiento frente a los cambios de clima y otros relacionados con trata de personas, reclutamiento y explotación sexual y laboral. Con el proyecto se han entregado 40.920 kits de higiene y alimentarios y 166.200 almuerzos en los comedores comunitarios. En las actividades de integración cultural han participado alrededor de 6.000 personas. En general, se han beneficiado 61.925, de las cuales un 32 por ciento son menores. De esta forma, Ayuda en Acción ratifica su compromiso con quienes están en condición de vulnerabilidad y exclusión, así como su prioridad por los derechos y la atención a la infancia.