La planeación de recursos a largo plazo, el aumento de la participación de las mujeres en cargos ejecutivos y una apuesta real por la diversidad son algunas de las políticas con las cuales la multinacional sueca Saab trabaja para desaparecer las brechas de género en todos los lugares del mundo donde se encuentra. Este gigante empresarial, con más de 16.000 empleados y dedicado a la industria de desarrollo militar y de defensa, lleva más de una década fomentando políticas y prácticas de equidad y diversidad. Muestra de esto es que, en solo diez años, Saab duplicó la participación de mujeres en sus cargos ejecutivos, al pasar del 14 por ciento en 2007 al 28 por ciento para 2017. “Nuestros ejecutivos tienen la convicción, apoyada por estudios, de que hay fuerza en la diversidad”, explica Evelena Persson, directora de Responsabilidad Corporativa de Saab, quien agrega: “Mezclar personas y sus ideas crea una empresa más innovadora y próspera a largo plazo”. Persson explica que la compañía no cree en las cuotas de género, por lo que se requiere llamar al menos a una mujer a entrevista para cargos ejecutivos. Esta política es tan estricta que no se puede decir que no encontraron candidatas. “Si no encuentras una buena candidata mujer, debes continuar la búsqueda”, subraya Persson. Esta dinámica ha sido adoptada por todos los colaboradores de Saab. Uno de los factores de éxito que han identificado es un alto grado de compromiso desde las directivas, definir objetivos y realizar seguimiento continuo. Persson enfatiza que no existe solución rápida para estos temas. Transformar culturas y modos de pensar toma tiempo. Esto se suma a, por ejemplo, sus políticas de contratación, los trabajos de verano para 500 personas de las cuales al menos el 50 por ciento deben ser mujeres, el patrocinio de una red de mujeres que estudian ciencia computacional y el premio anual a una mujer ejemplar. Por eso no extraña que Saab haya ganado en 2016 el Industry Equality Prize, un reconocimiento otorgado por el Consejo Industrial de Suecia por sus políticas para fomentar la equidad. Este premio no los distrae de su próxima meta: tener en 2025 un 35 por ciento de mujeres en cargos ejecutivos en Suecia y un 30 por ciento en el resto del mundo.