Desde hace varios años el Oriente antioqueño ofrece mucho potencial para los proyectos inmobiliarios. Rionegro, como capital de la subregión, ejemplifica esa transformación, pues allí cientos de familias construyen sus sueños.En 1984, Rafael Echavarría fundó en Medellín una compañía que hoy dirige con sus hijos: BEMSA Propiedad Raíz. Desde entonces empezó a promover proyectos inmobiliarios en la capital antioqueña, y muy pronto puso sus ojos en el oriente del departamento, en especial en Rionegro, al descubrir en esa área todas las condiciones para convertirse en polo de desarrollo regional.Así, BEMSA ha hecho en las afueras del municipio proyectos de lotes en unidad cerrada para bodegas, como La Regional; centros comerciales (Complex Llanogrande, Ciudadela Complex y el Mall Llanogrande); parcelaciones como Sibaris y Los Cerezos y viviendas de estratos 3, 4, 5 y 6 en los sectores El Caney, San Bartolo y Santafé. En el casco urbano también construyó los centros comerciales Colonial y Caminoverde, y el pasaje La Convención.“Estamos convencidos de que el desarrollo de Rionegro es importante para la región”, afirma Rafael Echavarría Noreña, hijo del fundador y gerente comercial de la compañía. “Lo vemos como un territorio de crecimiento latente al ser un municipio céntrico para todos los que trabajan o viven en el Oriente antioqueño”, agrega. Echavarría también habla del beneficio que representa para los sectores comercial, inmobiliario e industrial del municipio el Aeropuerto Internacional José María Córdova, que hace mucho más atractiva la región. Además, cuando quede listo el Túnel de Oriente, que conectará a la localidad con la capital de Antioquia, “Rionegro se convertirá en el segundo piso de Medellín”, sostiene el directivo.Impulsada por el progreso del territorio, BEMSA desarrolla allí dos grandes proyectos de casas y apartamentos que se encuentran en estado de construcción y venta. Se trata de inmuebles campestres de estratos 5 y 6 que mezclan estilos modernos y cuentan con el privilegio del contacto con la naturaleza. “Adelantamos un proyecto irrepetible en Rionegro, como Verdi”, agrega el gerente comercial. Su responsabilidad, la generación de espacios agradables en medio de ambientes naturales y su experiencia en el sector explican el éxito de esta compañía desde que nació, hace más de 30 años.
El proyecto Verdi, en su segunda etapa, tiene 32 ‘suites’ y cinco ‘homesuites’. Foto: Cortesía Bemsa.Espacios para siempreDos de sus proyectos en desarrollo, Pietrasanta Campestre y Verdi, se llevan a cabo en asociación con Proin y Serving. El primero está ubicado entre Llanogrande y San Antonio de Pereira. Cuenta con 148 lotes, 84 casas y 192 apartamentos en dos torres. Los lotes se consiguen desde 87,75 metros cuadrados por un valor de 178.500.000 pesos, y las casas, de 121,84 metros cuadrados, a 437.286.696 pesos. Los apartamentos, de 52,86 metros cuadrados, tienen un costo de 186.350.420 pesos.Exclusividad en todoVerdi queda detrás de la cancha de golf del Club Campestre de Llanogrande, y goza de una vista espectacular sobre el lago del complejo. Este proyecto inmobiliario contó en su primera etapa con 44 suites y 14 homesuites. Gracias a su éxito se desarrolló una segunda etapa de 32 suites y cinco homesuites.Los interesados en vivir esta experiencia única y confortable aún pueden conseguir suites de 74,79 metros cuadrados a 422.523.437 pesos, y homesuites de 200,79 metros cuadrados por 1.013.805.000 pesos.De esta forma, BEMSA Propiedad Raíz ofrece no solo estructuras físicas sino también un concepto de comodidad, estilo moderno y espacios saludables donde las familias encontrarán bienestar, un valor por el cual la compañía está dispuesta a seguir trabajando