SEMANA: ¿Qué lo ata a Rionegro?JULIÁN ORTEGA ARROYAVE: Cuando era niño, los fines de semana subía desde Medellín porque teníamos una finca acá. Mi familia tuvo un restaurante, Villa Lucía, de moda hace un tiempo y que aún existe.SEMANA: Usted ha creado empresas en diferentes sectores. ¿Cómo define su trabajo?J.O.A.: Aprovecho las oportunidades. Me gusta muchísimo trabajar y solo invierto en negocios con los que me siento identificado.SEMANA: Tenedor de oro es una de sus empresas más reconocidas…J.O.A.: Sí, con mi socio Willian Valencia, vendemos proteínas a nivel institucional, y aunque tiene un portafolio pequeño, es especializado. Ofrecemos filetes de res, cerdo, pollo y pescado; comidas rápidas como carnes de hamburguesa, chuzos de res, pollo y cerdo; embutidos como salchicha, jamón, longaniza, butifarra y salsas. Además, en Antioquia y el Eje Cafetero somos distribuidores exclusivos de la marca Frozen Express, la única de su tipo que utiliza papa colombiana como materia prima.SEMANA: ¿Cómo es la relación de esta empresa con el Oriente?J.O.A.: En la región tenemos ventas importantes y una buena presencia de marca. Varios de nuestros distribuidores están acá: compramos res, cerdo, todo de buena calidad y proveniente de campesinos y productores apasionados. Por otro lado, queremos mudar nuestra planta de procesamiento desde Sabaneta a Llanogrande, donde ya contamos con un terreno.SEMANA: ¿Dónde se encuentran los productos de Tenedor de oro?J.O.A.: En Chef Burger, Mondongo’s, Ay Caramba y Paliqueso, cadenas importantes en Antioquia. También hacemos algunos de los productos que se venden en los supermercados Euro.SEMANA: ¿Cuándo nació esa actitud emprendedora?J.O.A.: Desde pequeño me ha gusta mucho trabajar y emprender. Le saqué a mi papá esa vena por los negocios. En el colegio era el que organizaba los actos cívicos. Así nació Effusion, una empresa de entretenimiento. El año pasado organizamos las fiestas municipales de Rionegro y trajimos a artistas como Tego Calderón, Zion y Lennox, y Chocquibtown.SEMANA: ¿Qué hace exactamente Effusion?J.O.A.: Es una firma especializada en bodas, eventos empresariales y públicos en asocio con Andrés Gómez y Daniel Jaramillo. Diseñamos la imagen de sus eventos y les brindamos una asesoría de principio a fin para generar recordación en los asistentes. Trabajamos en todo el país, pero nuestro fuerte es Antioquia.SEMANA: ¿Qué tiene el Oriente antioqueño que permita crecer empresarialmente?J.O.A.: Rionegro es diferente a la ciudad; nos permite hacer los eventos como nos gusta: que generen sensaciones y recordación. Además, Llanogrande siempre es la primera opción para los matrimonios. Ningún sitio en Medellín tiene un paisaje como este.SEMANA: ¿Cómo es un matrimonio planeado por Effusion?J.O.A.: Nuestra regla número uno es que no prestamos asesoría por celular. Siempre nos reunimos con la pareja hasta cuatro o cinco veces, los escuchamos y formamos un vínculo de amistad. Lanzamos ideas y nos ponemos a crear. Nuestra meta es que la gente quede con la boca abierta, y para eso, cada montaje tiene que ser diferente; por lo general, no repetimos.SEMANA: ¿Cuáles han sido sus grandes clientes?J.O.A.: Para eventos públicos nos buscaron las alcaldías de Medellín y Rionegro; para corporativos, empresas como Bancolombia, Casio, Fábrica de Licores de Antioquia, Avon y Sura. Con los matrimonios es un voz a voz: siempre que alguien se casa y queda contento, nos recomienda con sus amigos. También les hemos prestado nuestros servicios a futbolistas y artistas.SEMANA: ¿Cómo siente que le retribuye Rionegro ese interés por crear empresa?J.O.A.: En la región veo oportunidades muy grandes, y más ahora con el actual alcalde, quien realmente le está metiendo la mano al crecimiento de este municipio; su pasión es contagiosa. Antes, por ejemplo, teníamos problemas de inseguridad en las vías y no podíamos llegar a ciertos puntos. Hoy Rionegro es seguro, eso ha hecho que mis empresas se beneficien directamente.SEMANA: ¿Qué se imagina para el futuro de Rionegro?J.O.A.: Es una de las ciudades con mayor proyección. Todos aspiran a a vivir aquí, rodeados de verde, algo que olvidamos en la ciudad. Creo que Rionegro crecerá, pero de forma organizada. Ya no será una continuación de Medellín.