Por Edgar Higuera Gómez*
Si el país quiere mejorar su competitividad debe optimizar los tiempos y los costos de movilización de los productos, desde la fase de suministro hasta su llegada al consumidor final. Y una de las mejores maneras de conseguirlo es a través del transporte multimodal, que propicia nuevas oportunidades para el comercio internacional. Esta modalidad de contratación en logística permite que el traslado de las mercancías sea más eficaz, brinda un alto nivel de servicio y reduce, de manera significativa, los costos administrativos.
En los negocios internacionales se requiere de un ecosistema auto-organizado, este demanda una red transportista de la mejor calidad y capaz de cumplir con los tiempos establecidos. En el transporte multimodal el intercambio de datos permite a las partes involucradas mejorar su base de información y agilizar la toma de decisiones. Además, facilita el movimiento de mercancías de manera fluida, utilizando eficientemente la infraestructura naviera, aérea o de transporte terrestre, como el ferrocarril, los camiones barcazas y los demás activos logísticos que generan beneficios y rentabilidad.
La planeación y el transporte de la carga pueden contar con diferentes rutas en el espacio global. El operador de transporte multimodal (OTM) está en capacidad de compartir la información a sus clientes en un proceso de alianzas colaborativas, o a través de las ventanillas únicas. De dicha manera facilita la gestión comercial y el intercambio en el mercado internacional. Por su parte, el transporte intermodal está soportado en el manejo del contenedor normal, o en los llamados contenedores inteligentes, como una fuente de datos que atraviesa los diferentes modos de transporte y su contrato de servicios en el documento de transporte multimodal.
MÁS RÁPIDO Y MÁS BARATO
Nuestro desempeño logístico ha mejorado en los últimos años, así lo indican los datos más recientes del Logistics Performance Index del Banco Mundial. En 2018, como lo demuestra el estudio, Colombia ascendió 36 posiciones en esta materia, pasando del puesto 94 al 58, entre 160 naciones. Es una evolución positiva. Si recordamos los retos topográficos de la geografía local este avance es muy meritorio. Pero aún existe una importante diferencia con otras economías de la Ocde, y se debe seguir el ejemplo de otros países de la región como Chile, Panamá, México y Brasil.
Con el desarrollo del transporte intermodal y la promoción del multimodalismo se podrán reducir los costos logísticos y de movilización de mercancías, que corresponden al 13,5 por ciento de las ventas, así lo evidencia la Encuesta Nacional de Logística de 2018, realizada por el Departamento Nacional de Planeación (DNP).
Colombia ocupa el quinto lugar en el manejo de contenedores en América Latina y tiene una capacidad cercana a los 4,0 millones de teus. De estos, 2,5 millones sirven al transbordo extranjero, lo que evidencia las facilidades de los puertos de Cartagena y Buenaventura para el manejo del transporte multimodal internacional. El país cuenta, además, con los servicios de 44 navieras que permiten un alto grado de conectividad global en diferentes rutas marítimas, a través de sus terminales portuarios.
Las líneas navieras Maersk y CGM ofrecen servicios con el Bill of Lading (conocimiento de embarque), desde y hacia Colombia, para la operación multimodal en el corredor logístico intermodal Ferrocarril-río Magdalena, que permite la conexión con el centro del país. De igual manera, operan con la terminal de acceso en los puertos fluviales de Barrancabermeja y Capulco, vía Cartagena, Santa Marta o Barranquilla; y también por intermedio de las zonas francas. Con la puesta en marcha del intermodalismo los costos para exportar un contenedor podrían tener una reducción del 26,2 por ciento en el modo férreo, y del 50,7 por ciento en el modo fluvial. Y la disminución en los tiempos sería de 14 y 44 por ciento, respectivamente, según el DNP, Conpes 3982 de 2020.
LAS TAREAS PENDIENTES
Desde 2015, la mejoría del transporte multimodal se ha convertido en otro de los grandes objetivos del país, pero aún se deben materializar los siguientes desafíos:
- Poner en marcha un plan estratégico para la promoción y el desarrollo de infraestructuras logísticas especializadas (ILE) (2020).
- Promover el uso de TIC en los procesos y fortalecer el capital humano.
- Mejorar la infraestructura de transporte intermodal, portuaria y logística de la región. Con una especial atención al desarrollo de los patios de contenedores, esenciales en el transporte multimodal.
- Adecuar las normas a los nuevos retos para evitar el exceso de costos para el país.
- Integrar los sistemas de información para facilitar el trabajo en conjunto, la interoperabilidad y la comunicación eficiente, entre la entidades que participan en el comercio exterior, como la Dian, el ICA, el Invima, Antinarcóticos, entre otros.
*Gerente de Logística, Transporte e Infraestructura de la Andi.