La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció este domingo que a través del mecanismo Covax se han entregado 1.000 millones de vacunas contra el coronavirus.

“Covax está liderando la operación de adquisición y suministro de vacunas más grande de la historia, con entregas a 144 países hasta la fecha [...]. El mecanismo está trabajando con gobiernos, fabricantes y socios para garantizar que, cuando los países reciban vacunas, puedan hacerlas llegar a las personas rápidamente”, señaló la organización.

¿Qué ofrece Covax?

  • Dosis de vacunas para al menos el 20 % de la población de los países.
  • Una cartera de vacunas diversificada y gestionada activamente.
  • Entregar las vacunas tan pronto como estén disponibles.
  • Poner fin a la fase aguda de la pandemia.
  • Reconstruir las economías.

Hay que señalar que el mecanismo Covax es el acuerdo más grande de la historia para la distribución de vacunas. Además, los expertos señalan que vacunarse contra el coronavirus parece seguir siendo la mejor estrategia para combatir la pandemia.

De hecho, desde que hizo aparición el virus SARS-CoV-2, no ha dejado de evolucionar. Hasta la fecha, la OMS ha catalogado de preocupantes cinco de sus variantes (alfa, beta, gamma, delta y ómicron), atendiendo a su impacto en la transmisión, la gravedad de la enfermedad o su capacidad para eludir la protección inmunitaria.

A la vez que la variante ómicron se extiende rápidamente por todo el mundo, es de prever que el SARS-CoV-2 siga evolucionando, por lo que es improbable que ómicron sea la última variante preocupante.

Es por ello que con las vacunas anticovídicas hoy disponibles, el objetivo primordial sigue cifrándose en reducir las muertes y las formas graves de enfermedad, y en proteger los sistemas de salud.

Además, las vacunas que han sido incluidas en la lista OMS de uso en emergencias, correspondientes a varias plataformas vacunales, proporcionan un elevado nivel de protección contra las formas graves de enfermedad y la muerte debidas a variantes preocupantes.

¿Quiénes deberían vacunarse?

Las vacunas contra la covid-19 son seguras para la mayor parte de las personas de 18 o más años, incluidas las que presentan afecciones previas de cualquier clase, incluidos trastornos autoinmunitarios. Esas afecciones incluyen: hipertensión, diabetes, asma, enfermedad pulmonar, hepática y renal, así como infecciones crónicas estables y controladas.

Los niños y los adolescentes suelen contraer formas más leves de la enfermedad que los adultos de modo que, a no ser que pertenezcan a un grupo con mayor riesgo de presentar cuadros graves de covid-19, es menos urgente vacunarlos en comparación con las personas mayores, las que padecen afecciones crónicas y los trabajadores de la salud.

En la mayor parte de los casos, es algo habitual experimentar efectos secundarios leves. Entre los efectos secundarios comunes que se presentan después de la vacunación, que indican que el organismo de la persona vacunada está creando protección contra la covid-19, figuran los siguientes:

  • Dolor en el brazo.
  • Fiebre leve.
  • Cansancio.
  • Cefaleas.
  • Dolores musculares y articulares.

No obstante, si en el lugar de la inyección aparece enrojecimiento o se siente dolor que aumenta al cabo de 24 horas, o si los efectos secundarios no desaparecen después de unos días, hay que ponerse en contacto con el proveedor de atención de salud.

Hay que señalar que aun después de haberse vacunado se deben seguir tomando precauciones para ralentizar y en última instancia contener la propagación del virus como:

  • Mantener una distancia de por lo menos un metro con los demás.
  • Usar una mascarilla, en particular en espacios muy concurridos, cerrados y mal ventilados.
  • Lavarse las manos con frecuencia.
  • Cubrirse con el codo flexionado al toser o estornudar.