Las autoridades sanitarias de China estudian la posibilidad de reforzar la vacuación de su población con el inmunizante desarrollado por la compañía Pfizer.
Actualmente, en ese país se usan mayoritariamente los biológicos producidos por laboratorios locales, pero se busca una tercera dosis de refuerzo con el de Pfizer, según publicó el diario Caixin.
Según la publicación, citando fuentes anónimas, “las autoridades chinas planean usar la vacuna (de Pfizer-BioNTech) como dosis de refuerzo para la gente que ha recibido vacunas de virus inactivado”.
Así mismo, se informó que es probable que esa dosis adicional sea gratuita.
Entre tanto, el presidente de Fosun Pharma, socia china de BioNTech, Wu Yifang, señaló que la Universidad de Hong Kong está llevando a cabo un estudio del rendimiento obtenido al mezclar la vacuna china de Sinovac con la de BioNTech.
Señaló que “los datos disponibles ahora mismo dan pie al optimismo”.
Este anunció se conoce en medio de un debate sobre la necesidad y la efectividad de inyectar una tercera dosis, que podría ser de vacunas distintas a la inoculada con anterioridad, debido a la expansión de la variante delta que tiene en alerta, especialmente, a varios países de Europa.
Se conoció que los reguladores de medicamentos chinos han terminado de revisar la vacuna de Pfizer-BioNTech, que se encontraría ahora en fase de revisión administrativa antes de autorizar aplicación.
“Los departamentos competentes están a punto de aprobar la vacuna”, indicó Wu durante una reunión con los accionistas de la empresa.
Fosun Pharma espera comenzar la producción nacional de la vacuna Pfizer antes de que termine el presente mes y su objetivo es poder manufacturar mil millones de dosis antes de que termine 2021, según Caixin.
En abril, el director ejecutivo de BioNTech, Ugur Sahin, expresó su confianza en recibir el visto bueno de los reguladores chinos antes de que terminara el mes de julio.
Si las autoridades regulatorias de China la prueban, sería la primera de ARN mensajero, y la primera desarrollada por compañías extranjeras, en obtener la luz verde en ese país continental, mientras que en Hong Kong se está utilizando la vacuna de BioNTech desde hace meses.
Entre tanto, en ese gigantesco país ya se avanza en la tercera fase de ensayos clínicos de su propia vacuna de ARN mensajero, desarrollada por la farmacéutica Walvax y el Ejército chino.
China debe cooperar más en la investigación sobre origen de pandemia
El anuncio sobre la posible aplicación de la tercera dosis con la vacuna Pfizer, se conoce en momentos en el que la Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró que China debe cooperar más en la investigación sobre los orígenes de la pandemia de coronavirus, cuyos primeros casos se detectaron en diciembre de 2019 en Wuhan.
“Esperamos que haya una mejor cooperación para que sepamos qué pasó realmente”, dijo el director de ese organismo Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una rueda de prensa en Ginebra.
“El primer problema es compartir los datos en bruto y dije desde las conclusiones de la primera fase de la investigación que este problema tenía que resolverse; el segundo es que hubo un intento prematuro de reducir el número de hipótesis como la del laboratorio en la transmisión a los humanos”, señaló Tedros.
El responsable de la organización internacional se refería a las conclusiones de una investigación conjunta dirigida en China por científicos chinos y un equipo seleccionado por el OMS, que había considerado muy improbable una filtración del nuevo coronavirus, aunque prevalecía la tesis de transmisión de un animal a una persona a través de un animal intermedio, aún no identificado.
Con información AFP