Las dosis de refuerzo son un interrogante que tienen tanto los Gobiernos del mundo, como sus habitantes. En la mayoría de las vacunas se deben aplicar dos dosis para tener el esquema completo de inmunización contra la covid-19.
Sin embargo, se ha hecho un llamado para que quienes ya completaron su esquema, se apliquen una nueva dosis, eso sí, sin importar del laboratorio que provenga.
Por ejemplo, en Argentina, desde el Ministerio de Salud Pública vienen implementando la estrategia para hacerle frente a la pandemia del nuevo coronavirus.
“La tercera dosis complementa el esquema primario para ampliar la protección y el refuerzo, después de haber recibido el esquema primario recomendado, lo que hace es reforzar la inmunidad en forma periódica y eso es al menos seis meses después de haber recibido el esquema primario”, dijo la ministra de Salud de Argentina, Carla Vizzotti.
En Colombia sucede lo mismo. El director de Medicamentos y Tecnología en Salud, del Ministerio de Salud, Leonardo Arregocés, denominó a esta combinación de vacunas, la vacunación heteróloga.
“La vacunación heteróloga lo que quiere decir es que se debe cambiar la plataforma sobre la que está desarrollada la vacuna que una persona recibió en su esquema inicial. Nosotros recomendamos que los que recibieron Pfizer, Moderna o Sinovac, se apliquen la AstraZeneca, y los que recibieron un vector viral, cualquiera de MRNA”, afirmó en su momento.
Hasta el momento en estos dos países no se han reportado casos especiales, relacionados con efectos secundarios, en quienes han recibido la vacuna de refuerzo de distintos laboratorios.
Otro experto afirmó que las “terceras dosis no tienen por qué dar más efectos secundarios que las dos dosis anteriores, no tiene por qué. Nuestro organismo responderá como responde a una vacuna cualquiera”, sentenció José Antonio López Trigo, expresidente de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología.
Solo con dosis de refuerzo no se frenará la epidemia de la covid-19
A pesar de esta combinación de vacunas, los expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmaron que la aplicación del refuerzo será insuficiente para evitar la aparición de variantes del nuevo coronavirus e instaron a mejorar los inmunizantes para frenar la transmisión de la enfermedad.
“Una estrategia de vacunación basada en dosis de refuerzo reiteradas” de las primeras vacunas “tiene pocas posibilidades de ser apropiada o viable”, indicó en un comunicado el Grupo Técnico Asesor (GTA) de la OMS sobre la composición de las vacunas contra el nuevo coronavirus.
“Se necesitan y deben desarrollarse vacunas contra la covid-19 con fuerte impacto en la prevención y la transmisión, además de la prevención de casos severos y de muertes”, expresó el grupo.
“A la espera de que esas vacunas estén disponibles, y a medida que el virus SARS-CoV-2 vaya evolucionando, quizás haga falta actualizar la composición de las vacunas anticovid actuales, para asegurarse de que continúan aportando los niveles de protección recomendados por la OMS contra la infección y la enfermedad” causada por las variantes, consideró el grupo de expertos.
Unas seis semanas después de que la variante ómicron fuera identificada en Sudáfrica, los datos de varios países coinciden en dos puntos: ómicron, que entra en la categoría de variantes preocupantes, se transmite mucho más rápido que la variante delta, anteriormente dominante, y globalmente parece comportar formas menos graves de la enfermedad.
Ahora bien, no se sabe si esa gravedad aparentemente menor se debe a las características de la variante o al hecho de que ómicron esté afectando a poblaciones parcialmente inmunizadas, ya sea por la vacuna o por una infección anterior.
Además, ómicron está avanzando en forma fulgurante en numerosos países y los contagios se están duplicando cada dos o tres días, algo que no había ocurrido con las variantes anteriores.
Las mutaciones de ómicron parecen permitirle reducir la inmunidad por anticuerpos contra el virus, por lo que probablemente puede contagiar a una cantidad importante de vacunados y reinfectar a personas que ya habían superado la enfermedad.
Con información de la AFP,