La farmacéutica Pfizer y su aliada BioNTech anunciaron recientemente que comenzaron los ensayos clínicos para desarrollar una vacuna específica contra la variante ómicron del virus de la covid-19. Por su parte, la farmacéutica Moderna anunció que entró en la fase 2 para el mismo objetivo, que pretende combatir a esta variante que es la predominante en los Estados Unidos.

A cerca del 50 % de los estadounidenses se les ha aplicado una dosis de refuerzo, de acuerdo con datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU.

Pero este anuncio de las compañías abren dudas: ¿los no vacunados tendrán que esperar hasta que haya una vacuna específica contra ómicron?, ¿qué ocurre cuando alguien ya tuvo covid-19 durante el aumento por ómicron?, ¿qué significa esto para las personas que ya recibieron un refuerzo o para aquellas que recibieron la vacuna Johnson & Johnson de una dosis y luego recibieron una dosis de otro tipo?

Esto lo respondió la doctora Leana Wen, analista médica de la cadena CNN, quien explicó que las personas no deberían esperar hasta que haya una vacuna específica contra ómicron para su dosis de refuerzo. “Todas las personas elegibles para recibir un refuerzo deben obtenerla ahora”, dijo.

Esto se debe a que ya hay evidencia de que se necesita una tercera dosis de Pfizer o Moderna o una segunda vacuna después de Johnson & Johnson para seguir con un alto nivel de protección contra la covid-19.

Dijo además que el hecho de recibir una vacuna de refuerzo no exime de poder tener esta cuarta dosis específica.

“Uno de los grupos que Pfizer estudia incluye a personas que recibieron tres dosis y ahora están recibiendo una cuarta dosis de la vacuna específica de ómicron. La empresa estudiará el efecto de esta cuarta dosis”, contó en diálogo con la cadena.

Estudio revela aumento de inmunidad en vacunados que superaron la covid-19

Un estudio publicado por la revista ‘Science Immunology’ reveló que no existe diferencia significativa a nivel inmunológico en una persona que se infecta de coronavirus al tener o no la vacuna, lo cual quiere decir que tras contraer covid-19 la persona adquiere una respuesta inmunitaria sorprendentemente alta.

Según esto, la vacunación, ya sea antes o después de contraer el coronavirus, puede inducir respuesta de anticuerpos muchísimo más fuertes que los propios que tienen los biológicos de las farmacéuticas.

“No hay ninguna diferencia entre infectarse y luego vacunarse, o vacunarse y luego contraer una infección”, afirma la decana de la Facultad de Medicina de la Universidad de Ciencias y Salud de Oregón, Estados Unidos, Fikadu Tafesse.

“(...) En cualquiera de los dos casos, se obtendrá una respuesta inmunitaria muy robusta, sorprendentemente alta”, agregó la funcionaria de educación.

Teniendo en cuenta que este estudio se realizó antes de la aparición de la variante ómicron, en ambos casos la respuesta del sistema inmune medida en anticuerpos reveló que estos se dan en mayores cantidades y más potentes, 10 veces más fuertes, que la inmunidad que genera la vacunación.

En este estudio se reclutaron 104 personas que habían recibido su esquema de vacunación completo con diferentes biológicos: 96 habían recibido Pfizer/BioNTech, seis de Moderna y dos de Janssen.

Esta muestra se dividió en 3 grupos: 42 vacunados sin contraer infección en ningún momento; 31 vacunados después de contraer la covid-19 y 31 que se infectaron tras tener su ciclo de vacunación.

De acuerdo con los resultados obtenidos, quienes tienen una inmunidad híbrida, es decir, por contagio y vacuna, tienen mayores niveles de anticuerpos que el grupo de vacunados que no se ha contagiado en ninguna circunstancia.

Por otra parte, la Universidad de Oxford, en Reino Unido, está buscando voluntarios que decidan exponerse al contagio de la covid-19, en pro de obtener datos relevantes que permitan mejorar la inmunización contra esta enfermedad.

De acuerdo con un comunicado de prensa de la universidad, que junto con AstraZeneca sacó uno de los biológicos que hoy se usa para el plan de vacunación en Colombia y gran parte del mundo, la idea de este proyecto es “ver qué tipo de respuesta inmune puede evitar que las personas se infecten con la cepa original del virus”.

Asimismo, recordó que este ensayo comenzó en abril de 2021, y que hasta la fecha aún se viene realizando la primera fase del mismo, en la que han participado jóvenes sanos, con los que se intenta obtener los mejores resultados y hallazgos tras someterlos al contagio del nuevo coronavirus.

“La primera fase del estudio comenzó en abril de 2021 y actualmente está estableciendo la dosis más baja de virus que, en aproximadamente el 50 % de las personas que previamente se infectaron o vacunaron de manera natural, puede afianzarse y comenzar a replicarse, pero produce pocos o ningún síntoma. En la segunda fase del estudio, todos los participantes serán infectados con la dosis estandarizada de virus que se estableció en la fase uno”, explica Oxford en su documento oficial.

Por otra parte, la universidad informó que para este proyecto se está utilizando la cepa original de Wuhan, China, misma que desató a finales de 2019 y principios de 2020 la pandemia tal como se conoce hoy en día.