De acuerdo con el más reciente reporte del Ministerio de Salud, Colombia registró 29.857 casos nuevos de contagio con coronavirus, impulsados especialmente por la variante ómicron que se ha convertido en predominante en Bogotá.
Son en total 5.410.698 las personas que se han infectado con el virus desde que se detectó el primer caso en el país en marzo de 2020. Así mismo, el número de fallecidos llegó a 130.529.
Una de las mayores preocupaciones para las autoridades sanitarias es la cifra de casos activos, que es de 160.046 ante el impacto que puedan tener frente a la ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).
Precisamente, el Ministerio de Salud informó que de las 10.917 camas UCI habilitadas, con corte al 11 de enero en Colombia, el país tiene 4.626 disponibles, lo que indica una disponibilidad del 42,37 %, cuyo comportamiento se ha mantenido en relativa estabilidad desde el 12 de diciembre de 2021 (43,54 %).
Frente a esto, el viceministro de Salud Pública y Prestación de Servicios (e), Germán Escobar, señaló que actualmente el país cuenta con más de 10.900 camas de Unidad de Cuidado Intensivo (UCI) habilitadas y activas para la prestación del servicio en este nivel de complejidad.
“Esto hace parte del plan estratégico del Gobierno nacional y el Ministerio de Salud para la ampliación de UCI que se inició desde el comienzo de la pandemia y que llevó a que el país pudiera duplicar su capacidad de cuidado crítico en los primeros meses de esta”, indicó.
Asimismo, señaló que de más de 10.900 camas, existe actualmente una disponibilidad mayor al 42 % y de las camas ocupadas, el 23 % de las mismas obedecen a pacientes sospechosos o confirmados de covid-19.
“Este indicador de hospitalización en UCI es especialmente relevante, en tanto que la situación referente a la ola ómicron pareciera reflejar un aumento de casos importante, que no está acompañado de una alta severidad”, precisó Escobar.
El funcionario indicó, así mismo, que la vigilancia constante de la ocupación y la disponibilidad de Unidades de Cuidado Intensivo (UCI) confirmará que esta variante tiene menor severidad y, en caso contrario, “el monitoreo estrecho permitirá tomar acciones inmediatas, sea sobre la disponibilidad de estas unidades o sobre estrategias de atención complementarias de puerta de entrada”, es decir, primer acceso a servicios de salud.
Por ello, reiteró que la mejor herramienta para evitar que se registre una saturación de estas UCI ante el aumento de contagios es la vacunación: “Por tanto se insiste en que todas las personas mayores de 18, en especial las personas mayores de 50 años accedan a completar sus esquemas de vacunación y a su refuerzo”.
Finalmente, destacó que se espera aumentar la cobertura de vacunación contra la covid-19, que ya tiene más del 76 % con al menos una dosis, 57 % con esquemas completos y 3,9 millones de personas con refuerzos.
Balance de vacunación
De acuerdo con el más reciente informe del Ministerio de Salud, con corte a las 23:59 del martes 11 de enero se han aplicado en el país cerca de 67 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus.
- Dosis distribuidas: 70.902.830.
- Dosis aplicadas: 66.935.960.
- Vacunados primeras dosis: 33.497.969.
- Vacunados segunda dosis: 23.982.866.
- Vacunados monodosis: 5.424.312.
- Esquemas completos una y dos dosis: 29.407.178.
- Dosis de refuerzo aplicadas: 4.030.813.
El pasado martes se aplicaron 289.442 dosis, de las cuales 125.198 corresponden a segundas dosis y 16.591 a monodosis.
Según el reporte, el sector privado ha aplicado 1.414.068 dosis con corte al 11 de enero. En este día Sucre no reportó jornada de vacunación.
“¿Tienes padres, abuelos o familiares mayores de 50 años, que ya cumplieron cuatro meses después de haber completado el esquema de vacunación contra la COVID-19? ¡Es hora de su dosis de refuerzo! Llévalos a cualquier punto de vacunación y sigamos cuidándolos”, publicó ese despacho al invitar a aplicar la dosis adicional del inmunizante.
MinSalud acompaña el Estudio Solidaridad de Vacunas
Así mismo, con el objetivo de evaluar dos vacunas contra la covid-19, una de ellas de proteína recombinante y la otra basada en ADN, se lanzó en Colombia, junto a Malí, el Estudio Solidaridad de Vacunas (ESV), patrocinado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El viceministro (e) de Salud Pública y Prestación de Servicios señaló que “este estudio comenzó hace dos meses en las ciudades de Cali, Armenia, Ibagué, Tunja, Duitama, Villavicencio, Cartagena y Bogotá (Suba-La Gaitana, Bosa-Parque Centro, Parque de Engativá-Pueblo, y en Ciudad Bolívar (Caracolí y Candelaria).
En dichos municipios se realiza el estudio desde unidades temporales móviles, tipo hangar o en IPS -todos habilitados para vacunación contra la covid-19-, con las que se puede llegar a las comunidades más aisladas.
El funcionario explicó que “tienen acceso al estudio personas mayores de 16 años, que están ubicadas en las zonas donde se está desarrollando el estudio, a las que no se haya administrado vacuna contra la covid-19, y que no hayan estado contagiadas con la enfermedad”.
En tal sentido, el viceministro (e) indicó que participar y divulgar el estudio, influirá decididamente en encontrar vacunas seguras y asequibles.
Vacunas seguras y de bajo costo
Escobar indicó que se reconoce que el coronavirus es una de las amenazas sanitarias y económicas de mayor envergadura que se haya visto en el mundo en decenios.
“Millones de personas han fallecido y un número considerable padece los efectos del virus, además, las medidas destinadas a frenar la propagación del virus han marcado profundamente la vida de los habitantes del planeta”, sostuvo.
Por ende, la OMS centra sus esfuerzos en estudios a nivel mundial, para combatir el virus, mediante el desarrollo de vacunas seguras, eficaces y de bajo costo contra la covid-19.
“El estudio y desarrollo de vacunas contra la covid-19 ha avanzado rápidamente y es claro que todas las vacunas deben someterse a estudios extensos y rigurosos, para cerciorarse de que sean seguras antes de formar parte de los programas de vacunación de los países”, dijo Escobar.
Puntualizó señalando que “las vacunas deben ofrecer una protección más duradera; así mismo, deben transportarse más fácilmente y su elaboración ser menos costosa. Si bien el mundo necesita un número mayor de vacunas, es importante asegurarse de que todos los ciudadanos, donde sea que vivan, puedan protegerse, de manera segura y accesible económicamente”.