Las personas inmunodeprimidas podrán recibir una cuarta dosis de la vacuna anticovid en Brasil, cuatro meses después de la aplicación de la tercera, anunció este lunes el Ministerio de Salud.

La cartera recomendó en una nota “una dosis de refuerzo para todos los individuos inmunodeprimidos mayores de 18 años que ya hayan recibido tres dosis con anterioridad (...) a partir de los cuatro meses” de la última.

La medida concierne particularmente a personas con inmunodeficiencias graves, como portadores del VIH o pacientes con cáncer sometidos a quimioterapia.

El Ministerio también informó que prevé reducir de cinco a cuatro meses el intervalo entre la segunda y la tercera dosis para la población en general.

El gobierno anunció igualmente este lunes la donación de 10 millones de dosis de vacunas a países vulnerables, a través del sistema Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El ministerio aseguró que esta donación “no comprometerá el plan de vacunación” de la población en el país.

La vacunación en Brasil se ha acelerado en los últimos meses y, hasta el momento, más de dos tercios de la población ya ha recibido al menos dos dosis de los inmunizantes.

Pero la campaña de inmunización tuvo un comienzo tardío y caótico, en medio de los ataques a las vacunas por parte del presidente de ultraderecha, Jair Bolsonaro.

Una asociación que representa a los empleados de Anvisa denunció los “métodos fascistas” de Bolsonaro. El regulador pidió a la Policía Federal protección para su personal luego de haber “recibido amenazas de violencia”.

La covid-19 ha causado más de 617.000 muertes en Brasil, el segundo país más enlutado del mundo en números absolutos después de Estados Unidos.

Jair Bolsonaro se ha negado a vacunarse contra la covid-19 en un país donde la pandemia ha causado más de 617.000 muertes en Brasil, el segundo país más enlutado del mundo en números absolutos después de Estados Unidos. (Photo by EVARISTO SA / AFP) | Foto: AFP or licensors

Regulador sanitario de Brasil denuncia amenazas de Bolsonaro tras aprobar vacuna anticovid en niños

El regulador sanitario de Brasil, Anvisa, rechazó las amenazas del presidente Jair Bolsonaro al pedir que se revelaran los nombres de los expertos que aprobaron las vacunas anticovid para niños, una solicitud que los empleados de la agencia consideraron “fascista”.

“Anvisa está siempre lista para atender demandas de informaciones, pero repudia y repele con vehemencia cualquier amenaza, explícita o velada, que intente constringir, intimidar o comprometer el libre ejercicio de las actividades regulatorias y el sustento de nuestras familias”, indicó la agencia en un comunicado.

El regulador aprobó la vacuna Pfizer-BioNTech para uso en menores de cinco a once años, uniéndose a una lista cada vez mayor de países que extienden la vacunación a ese grupo etario.

Bolsonaro, quien ha bromeado diciendo que los inmunizantes pueden transformar a la gente en “caimán” y se niega a vacunarse, dijo ese día que pidió “extraoficialmente” el nombre de quienes aprobaron la vacunación de los niños.

“Ustedes tienen derecho a saber el nombre de las personas que aprobaron la vacuna para sus hijos. Usted decide si compensa o no”, afirmó en su transmisión semanal por redes sociales, tras mencionar posibles contraindicaciones al recibir la dosis.

En respuesta a los comentarios del presidente de extrema derecha, Anvisa aseguró que sus oficiales han recibido “amenazas de muerte” desde octubre por su trabajo de evaluar y aprobar vacunas anticovid, y sugirió que las palabras de Bolsonaro atizan esas presiones.

“Luego de sufrir amenazas de muerte y toda suerte de actos criminales por parte de agentes antivacuna, en el marco de la vacunación para niños, esta agencia se encuentra en el foco y la mira de activismo político violento”, afirmó la agencia.

La asociación que representa a los empleados del regulador sanitario, Univisa, también condenó los mensajes de Bolsonaro.

“Se muestra como una amenaza de retaliación que, al no encontrar medios institucionales para hacerlo, se vale de la incitación al ciudadano, método abiertamente fascista y cuyos resultados pueden ser trágicos y violentos”, señaló en una nota. Bolsonaro ha provocado controversia en repetidas ocasiones con su manejo de la pandemia

El mandatario restó importancia al virus al llamarlo una “pequeña gripe” y burló las recomendaciones de los expertos sobre medidas para quedarse en casa, mascarillas y vacunas.

En octubre, un comité de investigación del Senado recomendó que enfrentara cargos penales, incluidos crímenes de lesa humanidad, por la respuesta de su gobierno a la covid-19.

Con información AFP