El mundo atraviesa desde finales de 2019 la pandemia del coronavirus, la cual se detectó por primera vez en Wuhan, China. Desde entonces, según datos de la Universidad Johns Hopkins son 257,96 millones de personas las que se han contagiado del virus y 5,15 millones las que se han convertido en víctimas mortales del mismo.
Un par de meses más tarde, comenzaron a surgir en los diferentes países del mundo variantes del virus, las cuales tenían un nivel de contagiosidad mayor, lo que permitía al virus propagarse más rápido en la población.
Pero existen muchas dudas sobre el surgimiento de estas cepas, y su orígen. Al respecto, el profesor de Medicina de la Universidad George Washington, Elmer Huerta, respondió cuáles son las personas que cuentan con una mayor probabilidad de padecer una mutación del virus en sus cuerpos.
“Se considera que aquellas personas que tienen un sistema inmunológico relativamente débil, es decir que estén inmunosuprimidos, y en quienes el virus permanece dentro de su organismo durante periodos prolongados de tiempo, son las más susceptibles a que el virus pueda mutar en ellas”, dijo el experto en CNN.
Así mismo, hizo aclaraciones respecto a las personas que pueden recibir las diferentes vacunas que han sido aprobadas y las recomendaciones acerca de los síntomas que pueden presentarse tras haber recibido las dosis de las mismas.
Por ejemplo, surgió una duda de un sujeto que se recuperó del síndrome de Guillain Barré tras haber padecido chikungunya, quien preguntó si podía recibir alguna de las vacunas que están disponibles hasta el momento.
Al respecto, aseguró que “los Centros de Control de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) son muy claros en decir que las personas con historia de Guillain-Barré pueden recibir las vacunas de Pfizer, Moderna o Johnson & Johnson contra la covid-19″.
Así como otra persona, que cuestionó sobre las vacunas recomendables para pacientes con cardiopatía coronaria, a lo que respondió que “cualquiera de las vacunas en uso puede proteger de la enfermedad grave y de la muerte a una persona con enfermedad crónica”.
También se reportó un hombre que fue vacunado hace dos meses con Sputnik V, y en este momento presenta síntomas como fiebre de 38 grados, dolor muscular y cansancio, y preguntaba si era consecuencia de la vacuna, a lo que el doctor sugirió visitar al médico, pues por lo general los efectos secundarios del biológico ocurren los primeros días posteriores al pinchazo.
Vale la pena recordar que el enviado especial de la Organización Mundial de la Salud para la covid-19, David Nabarro, cuestionó que muchas medidas se hayan levantado o suavizado de manera anticipada, influyendo negativamente en la lucha contra la pandemia y causando el incremento de los casos de infección.
Para el especialista, varios países europeos suavizaron muy temprano las restricciones durante la primera ola y no pudieron prepararse adecuadamente para la segunda, lo que ha producido un disparo de los contagios.
“La reacción de Europa fue insuficiente. No se logró construir la infraestructura necesaria en los meses de verano después de controlar la primera ola. Y ahora tenemos una segunda ola. Si no se construye la infraestructura necesaria ahora, habrá una tercera ola a principios del próximo año”, señaló a medios suizos.
Cuestionó, así mismo, que en Europa las medidas como el distanciamiento social, el uso del tapabocas y el lavado de manos permanente no se haya cumplido estrictamente, situación diferente a la que se puede observar en los países asiáticos donde estas se guardan con rigurosidad.
Para el delegado de la OMS, la situación en Europa se registra debido a que hay una carencia de estructuras de apoyo en las comunidades locales, que son las que mejor podrían proporcionar información a los vecinos, monitorear a la población y actuar rápidamente en caso de producirse un nuevo brote.
“Me preocupa mucho lo que está pasando en toda Europa, incluyendo Europa Occidental. Me refiero no solo al gran número de contagios, sino también a la velocidad con la que están aumentando”, indicó en otra entrevista, concedida este lunes 22 de noviembre a Sky News.
Agregó que “no me sorprende que este virus no se vaya y tampoco me sorprende que la gente esté protestando, porque los ciudadanos de muchos países están realmente hartos de lo que está pasando”.
Finalmente, aseguró que el reto de varios países de Europa Occidental es evitar la expansión de la pandemia con medidas distintas al confinamiento.
“Porque es una medida muy burda. Se paga un alto precio por ello. El confinamiento es el último recurso, es una señal de fracaso”, indicó.