Solo uno de cuatro pacientes hospitalizados por covid-19 estaba totalmente restablecido al cabo de un año, según un estudio británico publicado este domingo, que precisa que ser mujer u obeso aumenta el riesgo de mantener los problemas de salud.
Este estudio, presentado en el Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas en Lisboa y publicado en The Lancet Respiratory Medicine, usó datos de pacientes adultos de 39 hospitales del Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés) del Reino Unido, entre el 7 de marzo de 2020 y el 18 de abril de 2021.
La recuperación se evaluó con medidas de resultados de diferentes exámenes a 2.320 pacientes a cinco meses de ser dados de alta del hospital y al 33% de ellos un año después.
Los investigadores tomaron principalmente muestras de sangre en la visita de cinco meses para analizar la presencia de varias proteínas inflamatorias.
El estudio descubrió que la proporción de adultos que se habían recuperado totalmente no cambió significativamente entre los cinco meses (25,5 %) y el año después (28,9 %) de la salida del hospital.
Ser mujer, obeso y haber sido recibido ventilación mecánica en el hospital se asociaron con una menor probabilidad de sentirse totalmente recuperado al año, agrega la investigación.
Entre los síntomas más frecuentes del llamado “covid largo” están la fatiga, los dolores musculares, el enlentecimiento físico, la falta de sueño y la dificultad para respirar.
Medidas contra la covid-19 están asociadas con una peor salud mental
Las medidas de restricción contra la covid-19 están asociadas con una salud mental ligeramente peor y evaluaciones de vida más bajas, según dos nuevos estudios que revisan datos de 15 países entre abril de 2020 y junio de 2021, publicados en la revista The Lancet Public Health.
Las investigaciones han revelado que la salud mental de la población de los países que intentaron controlar la transmisión están más afectados por la covid-19 que la de las personas de países que intentaron suprimirla.
El primer estudio indica que el tipo y el momento de la restricción pandémica juegan un factor en la determinación de los impactos en la salud mental mientras que el segundo sugiere que diferentes grupos los sienten de manera desproporcionada.
Los estudios señalan que los impactos en la salud mental asociados con los encierros fueron peores para las mujeres y las mujeres que vivían en hogares con niños dependientes, en comparación con los hombres de todas las edades.
A nivel nacional, los países que intentaron eliminar la transmisión comunitaria de covid-19 dentro de sus fronteras (eliminadores) experimentaron menos muertes y tendencias de salud mental equivalentes o mejores durante la pandemia que los países que intentaron controlar en lugar de eliminar la transmisión (mitigadores).
En el transcurso de la pandemia, los gobiernos de todo el mundo emplearon diversas estrategias y emitieron una variedad de pautas para contener la pandemia de covid-19. Sin embargo, las medidas de contención no fueron homogéneas; algunos países adoptaron estrategias de eliminación ambiciosas con objetivos de transmisión comunitaria cero.
Otros países optaron por ralentizar la transmisión a través de una combinación de cierres intermitentes, cierres de lugares de trabajo, negocios y escuelas, distanciamiento social, uso de mascarillas y la cancelación de reuniones públicas y transporte público.
Así, se detalla que países como Corea del Sur y Japón implementaron acciones tempranas y específicas, como restricciones de viajes internacionales, pruebas y rastreo de contactos, lo que resultó en niveles más bajos de infecciones por covid-19 y les permitió optar por estrategias de contención internas más indulgentes.
Por el contrario, los países mitigadores como Francia y el Reino Unido optaron por restricciones de viaje internacionales menos prohibitivas y se propusieron controlar, en lugar de eliminar, el virus a través de medidas de política internas estrictas y prolongadas, incluidos el distanciamiento físico y los requisitos de quedarse en casa.
“Las respuestas gubernamentales a la pandemia de covid-19 han sido ampliamente debatidas. A primera vista, puede parecer que los países eliminadores implementaron estrategias mucho más duras que otros países debido a sus prohibiciones de viajes internacionales ampliamente informadas. Pero, en realidad, las personas dentro de estas fronteras disfrutaron más libertad y medidas de contención doméstica menos restrictivas en general que los ciudadanos de los países mitigadores”, ha comentado la doctora Lara Aknin, de la Universidad Simon Fraser (Canadá).
*Con información de Europa Press y AFP.