Con la llegada de la variante ómicron de la covid-19 y una cuarta y quinta ola con cifras altas de contagios, varios países empezaron a tomar medidas y a poner nuevas restricciones para evitar otra crisis. Funcionarios de salud advierten a las autoridades que se debe proteger de escenarios complejos.

Por ello, países de Europa han endurecido medidas con el fin de salvaguardar las vidas de los habitantes. Olaf Scholz, canciller alemán, señaló en su más reciente visita a Roma que además de regulaciones que ya se conocen en cuanto al trabajo y el transporte público, vendrán más restricciones.

Además, se conoce que se ha pedido apelar a la responsabilidad individual, especialmente en estas fechas en las que familias enteras esperan reunirse. Las alarmantes cifras se han dado especialmente en Dinamarca, Portugal y Reino Unido, en donde se confirmó que las cifras se duplican cada día y medio a tres días.

En general, las medidas que se están discutiendo en algunos países del continente europeo incluyen toques de queda, reuniones de máximo diez personas (excluyendo a menores de 14 años), cierres de bares, galerías de arte u otros espacios de esparcimiento, presentar prueba de coronavirus para ingresar a algunos espacios y teletrabajo.

Con la preocupación de un alza de contagios algunos países, entre ellos Dinamarca e Irlanda, han regresado a bloqueos nacionales para frenar la variante ómicron. De acuerdo con el primer ministro Mark Rutte, era una medida inevitable debido a la quinta ola provocada por la variante.

En Dinamarca se está buscando cerrar teatros, cines, auditorios de conciertos, parques de diversiones, museos y galerías de arte, además de restablecer el toque de queda. También, otros lugares de esparcimiento como restaurantes tendrán que limitar nuevamente su número de clientes.

Por su parte, Irlanda emitió un toque de queda a partir de las 8:00 p. m. en pubs y restaurantes, mientras que los eventos bajo techo también están restringidos y tendrán límites en la capacidad.

De acuerdo con el primer ministro irlandés, Taoiseach Micheál Martin, la nueva variante traerá un aumento masivo de casos positivos, por lo que confirmó que las nuevas medidas serán hasta el 30 de enero.

Con un panorama más preocupante se encuentra Portugal, en donde casi la mitad de los nuevos contagios son causados por ómicron. En ese sentido, en sus nuevas medidas, el teletrabajo vuelve a ser obligatorio y durante dos semanas se cerrarán bares y discotecas. Además, se restablecerán los límites de compras y la prueba negativa será obligatoria para asistir a algún show o evento deportivo.

Preocupación mundial

Los laboratorios genómicos globales detectaron en la última semana unos 14.000 nuevos casos de coronavirus de la nueva variante ómicron, lo que representa cuatro veces más que los aproximadamente 3.500 de los siete días anteriores, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

De acuerdo con los análisis de la red mundial de laboratorios GISAID, que trabaja con la OMS, el porcentaje de detecciones de la variante ómicron en sus secuencias ha aumentado del 0,1 % de hace una semana al 1,6 % en estos momentos.

No obstante, señaló que la variante delta sigue siendo dominante en 2021 con el 96 %. Es de indicar que solo una pequeña parte de los casos de coronavirus son analizados en laboratorio, razón por la cual los datos tienen un valor meramente estadístico.

2022 debe ser el año “en el que acabemos con la pandemia”, dijo el lunes el jefe de la OMS, quien pidió reducir la desigualdad en el acceso a las vacunas.

En una rueda de prensa en Ginebra, el director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó un deseo: “2022 debe ser el año en el que acabemos con la pandemia”.

No obstante, el jefe advirtió de los riesgos de las reuniones familiares durante esta época de fiestas decembrinas. Señaló que es mejor cancelar las celebraciones ahora “y celebrar la vida mañana”, que “celebrar hoy y estar de luto mañana”.