A través de una publicación en su cuenta de Twitter se informó que el cardenal estadounidense Raymond Leo Burke fue hospitalizado por covid-19 y está conectado a un ventilador.
El trino del prelado, quien ha sido un constante crítico de la vacunación contra el coronavirus, fue publicado el pasado 10 de agosto y se señala que dio positivo para coronavirus. “Gracias a Dios, estoy descansando cómodamente y recibiendo una excelente atención médica”, escribió.
“¡Alabado sea Jesucristo! Deseo informarle que recientemente he dado positivo por el virus COVID-19. Por favor, ore por mí al comenzar mi recuperación. Confiemos en la Divina Providencia. Dios lo bendiga”, indicó el purpurado al dar a conocer si situación de salud.
Cuatro días después, el 14 de agosto, desde la cuenta del cardenal Burke, fue publicado otro trino en el que se informó sobre su ingreso a un centro hospitalario como consecuencia del coronavirus.
“El cardenal Burke ha sido ingresado en el hospital con COVID-19 y está siendo asistido por un ventilador. Los médicos se sienten alentados por su progreso. ÉL rezó fielmente el Rosario por los que padecían el virus. En esta Vigilia de la Asunción, recemos ahora el Rosario por él”, se indicó.
Hasta el momento no hay claridad si el purpurado, que tiene poco más de 70 años, ha sido vacunado contra el covid-19.
Las vacunas evitan la enfermedad grave del coronavirus, como lo han demostrado las cifras y estudios a lo largo del mundo.
Se informó que el prelado de la Iglesia Católica Romana tenía programado participar en varias misas durante las últimas semanas en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en La Crosse, Wisconsin, que fue fundado por Burke.
Así mismo, tenía programado celebrar una misa el 5 de agosto en ese lugar, pero la publicación en Twitter fue eliminada.
Entre tanto, en un video en Youtube quedó registrado un oficio religioso en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, el pasado 30 de julio, que es el último registro de su actividad pastoral.
El cardenal Burke ha sido uno de los más visibles opositores a la vacuna contra el coronavirus. De hecho, en una homilía en diciembre de 2020, se refirió al covid-19 como el “misterioso virus de Wuhan” y dijo que “ha sido utilizado por ciertas fuerzas, contrarias a las familias y a la libertad de estados, para avanzar en su agenda malvada”.
El prelado ha sido un crítico del papa Francisco y fue reasignado del tribunal superior del Vaticano a un puesto inferior en 2014. Y a pesar de que el sumo pontífice ha invitado a los feligreses a vacunarse, y él mismo se aplicó las dos dosis recomendadas, el cardenal estadounidense dijo en el Foro de la Vida de Roma que la inmunización viola la integridad de los ciudadanos.
“La vacunación en sí no puede imponerse de manera totalitaria a los ciudadanos. Cuando el Estado adopta tal práctica, viola la integridad de sus ciudadanos. Si bien el Estado puede proporcionar regulaciones para la salvaguarda de la salud, no es el máximo, no es el máximo proveedor de salud, Dios lo es. Todo lo que el Estado proponga debe respetar a Dios y su ley”, señaló en su momento.
Incluso, el prelado repitió afirmaciones infundadas, durante el evento, como las ya refutadas de que las vacunas contra el coronavirus contenían microchips ocultos que hacen que las personas vacunadas sean susceptibles al control del gobierno.
“Hay cierto movimiento para insistir en que ahora todo el mundo debe vacunarse contra el coronavirus e incluso que se debe colocar una especie de microchip debajo de la piel de cada persona para que en cualquier momento pueda ser controlado en materia de salud y de otros asuntos que solo podemos imaginar como un posible objeto de control por parte del Estado”, dijo el purpurado.
Al referirse a este tipo de insinuaciones, el sacerdote Edward Beck comentó en CNN que estos puntos de vista conservadores son “valores atípicos” y no son comunes entre las personas con las que se encuentra con regularidad.
“Creo que para la mayoría de los católicos, el cardenal Burke y algunos otros obispos de extrema derecha son vistos como atípicos, especialmente en este tema. Así que, aunque tienen algunos seguidores que escuchan lo que dicen, yo no creo que de ninguna manera sea la mayoría, o que tengan una gran influencia en lo que dicen”, señaló.
El sacerdote agregó: “Estoy trabajando en tres parroquias, prácticamente todas las personas con las que hablé se están vacunando, si no se están vacunando es por razones de salud, no es porque la iglesia esté diciendo algo que los haga dudar. Entonces, realmente no creo que las posiciones del cardenal Burke y los de su clase en este momento estén teniendo un gran efecto en la mayoría de los católicos romanos”.