El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, volvió a ser protagonista en las últimas horas luego de asegurar, como lo han hecho la mayoría de organizaciones internacionales, que la pandemia de covid-19 aún no acaba y que, de hecho, en los próximos meses se podría registrar un total de 100 millones de nuevas infecciones de este virus en ese país.
De acuerdo con varios funcionarios de la Casa Blanca, aunque esta cifra es verdadera, lo cierto es que solo se llegaría a esta en caso de que tanto el Gobierno como el Congreso no tomen las medidas necesarias para contrarrestar la propagación de la covid-19 entre los estadounidenses.
Los trabajadores del Ejecutivo estadounidense han hecho varias declaraciones públicas dirigidas al Parlamento para que este pueda autorizar una inyección económica mayor a la lucha contra la pandemia, y de esta forma preparar al país de cara a lo que será la arremetida del virus en otoño e invierno de 2022.
“Si eso ocurre o no (el contagio de los 100 millones de personas) depende en gran medida de nosotros como país”, explicó el doctor Ashish Jha, coordinador de la respuesta a la covid-19 de la Casa Blanca, en conversación con ABC News.
“Estamos analizando una serie de modelos, tanto internos como externos, y lo que predicen es que si no nos adelantamos a este asunto, vamos a tener una gran inmunidad menguante. Este virus sigue evolucionando y podemos ver una ola bastante considerable de infecciones, hospitalizaciones y muertes este otoño e invierno”, añadió el experto.
Y es que según datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de EE. UU. (CDC, por sus siglas en inglés), el dato otorgado por el Gobierno estadounidense no es aislado, sino que va de acuerdo a lo que se ha visto en los últimos días.
Los CDC mencionaron que en la última semana Estados Unidos ha reportado un aumento de más del 50 % de los casos en al menos ocho estados de la Unión Americana, llegando, incluso, a un nivel “alto” de contagios en algunos territorios.
Por su parte, la doctora Syra Madad, epidemióloga de NYC Health + Hospitals, manifestó en conversación con CNN que aunque es posible contrarrestar lo que por ahora es una realidad a futuro, esta no debería ser una excusa para no tomar esta situación con seriedad y verdadero compromiso de cambio, tanto desde la ciudadanía como desde las autoridades sanitarias del país.
“Tenemos las herramientas y los recursos para protegernos y proteger a los que nos rodean. Es importante que la gente sea consciente de que el nivel de riesgo a su alrededor está aumentando. Así que hay cosas que pueden hacer para reducir el riesgo de infectarse y, desde luego, de tener un resultado grave”, explicó Madad.
Sin embargo, aclaró que, personalmente, no conoce de dónde el Gobierno sacó el dato de los 100 millones de estadounidenses infectados a final de año, aunque intentó presumir la forma en la que el Ejecutivo llegó a esa conclusión.
“Solo se puede predecir que probablemente sea una combinación de inmunidad decreciente, además de, obviamente, los estadounidenses que ni siquiera se han vacunado completamente. Todavía tenemos millones de estadounidenses que solo han recibido una dosis. Tenemos millones de estadounidenses que ni siquiera han recibido una dosis. Así que es una combinación de todos esos factores, junto con los que están inmunocomprometidos”, añadió.
Por último, recordó que lo más importante, además de lograr que se destinen mayores recursos para luchar contra la covid-19, es hacer que las personas sean conscientes de que la pandemia no ha llegado a su fin y que de esta forma tomen medidas aún necesarias para evitar a toda costa un contagio.
“Creo que es importante que la gente se dé cuenta de que todavía estamos en una pandemia. Por mucho que no queramos estar en una, esa es la realidad (…) y estamos viendo cada vez más de estas subvariantes que aparecen tanto aquí en los EE. UU., como en todo el mundo. Es importante que la gente se dé cuenta de que esto no se acaba hasta que se acaba en todo el mundo”, concluyó.