Aunque sus respectivos programas de vacunación han avanzado con un éxito relativo, países como Estados Unidos siguen padeciendo el impacto de la pandemia del coronavirus, sobre todo ante el reciente aumento en los contagios impulsado por la variante delta del virus, más contagiosa que las demás cepas.
Las hospitalizaciones en el territorio estadounidense están alcanzando niveles comparables a los de la ola del verano pasado, por lo que las autoridades han tenido que retomar restricciones sanitarias, como que las personas vacunadas tengan que volver a usar tapabocas en espacios interiores dado el aumento de casos de coronavirus.
El lunes pasado, Estados Unidos alcanzó, con un mes de retraso, el objetivo fijado por el presidente Joe Biden de que el 70 % de los adultos hubiera recibido al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus.
No obstante, en territorios como el sur y el medio oeste del país la campaña de vacunación no ha avanzado a la par que el resto de regiones, por lo que el objetivo trazado por el mandatario estadounidense no se cumplió en las fechas estimadas.
Las poblaciones más jóvenes, los pobres y las minorías étnicas han sido las de más lento acceso a la vacunación contra la covid-19. Entre tanto, el alcalde demócrata Bill de Blasio anunció que Nueva York exigirá certificado de vacunación para permitir el acceso a restaurantes, salas de espectáculos y gimnasios.
En ese sentido, Nueva York se convertirá en la primera de las grandes metrópolis de Estados Unidos en crear un pase sanitario. Cabe resaltar que el 71,8 % de los adultos, en una población de más de ocho millones de personas en esa ciudad, ya ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus.
“Si usted está vacunado (...) tiene la llave, puede abrir la puerta. Pero si no está vacunado, lamentablemente no podrá participar de muchas cosas... Es hora de que la gente vea la vacunación como algo, literalmente, necesario para tener una vida completa y saludable”, aseguró el alcalde De Blasio en una conferencia de prensa, como recoge la AFP.
Hay que señalar que en la actualidad, según explican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por su siglas en inglés) de EE. UU. en su página web, las personas que ya están vacunadas pueden reanudar sus actividades sin usar tapabocas o sin mantenerse a una distancia de dos metros, excepto cuando lo exijan las leyes, reglas y regulaciones federales, estatales, locales, tribales o territoriales.
Aumento de contagios en Florida y Texas
“Uno de cada tres casos en todo el país se ha registrado en Florida y Texas en la última semana”, le aseguró a la prensa Jeff Zients, coordinador de la Casa Blanca para la pandemia, quien también explicó que la mayoría de los casos se concentran en las comunidades con menores tasas de vacunación contra el virus.
Frente a la variante delta, algunos países incluso están empezando a aplicar vacunas de refuerzo, que según algunas compañías farmacéuticas podrían mejorar la inmunidad de las variantes más infecciosas, como es el caso de la variante delta.
Territorios como Luisiana también han registrado cifras de pacientes hospitalizados similares a las reportadas durante los picos más altos desde que se inició la pandemia a comienzos del año pasado.
En las últimas semanas, el alcalde y el gobernador del estado de Nueva York emitieron regulaciones que endurecen las exigencias de vacunación en medio de la pandemia, a medida que Estados Unidos lucha contra la variante delta del virus.
Las medidas llegan en momentos en que el país intenta que crezcan las tasas de vacunación, que se han estancado considerablemente en los últimos meses a pesar de que la nación norteamericana tiene el suministro de dosis más alto del mundo.
Con información de la AFP.