Mientras en varios países los casos de contagio con coronavirus siguen un aumento por el impacto de la variante ómicron, los científicos avanzan en las investigaciones para tratar de controlar la pandemia que apareció en China hace poco más de dos años.

De acuerdo con el más reciente informe de la Universidad Johns Hopkins, en el mundo se han registrado hasta este miércoles 259.419.708 personas contagiadas y 5.460.302 fallecidos. En tanto que a nivel global se han aplicado más de nueve mil doscientos millones de dosis de vacunas contra el coronavirus.

En medio de ese panorama se acaba de conocer el resultado de un estudio adelantado por investigadores del Colegio de Medicina de la Universidad de Arizona y Tucson, que fue publicado recientemente en el Journal of Allergy and Clinical Immunology y por la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Según ese análisis, se encontró que el lisado bacteriano OM-85 bloquea la infección por SARS-CoV-2 al disminuir la capacidad del coronavirus para unirse al receptor ACE2 de la superficie de las células pulmonares y así previene e inhibe la covid-19, con lo cual se avanzaría en el control de la pandemia.

Los autores del estudio indicaron que la combinación de extractos de bacteria denominados OM-85 utilizados en Europa desde hace varios años y que se utilizan asctualmente en primera instancia por médicos italianos para tratar infecciones respiratorias superiores en niños y adultos, puede ofrecer una nueva forma de prevenir o reducir la infección con covid-19.

Se determinó que la combinación específica de extractos bacterianos conocida como OM-85 inhibe la infección por SARS-CoV-2 al reducir la capacidad del virus para adherirse a las células pulmonares.

La autora principal del estudio, Donata Vercelli, quien es profesora de medicina celular y molecular en la Facultad de Medicina de Arizona-Tucson y de genética en el Instituto BIO5, indicó que “las estrategias actuales de prevención de infecciones se basan en vacunas que hacen que nuestro sistema inmunológico responda principalmente produciendo anticuerpos”.

Agregó que “los anticuerpos se adhieren a una parte específica del virus que actúa como la llave y evitan que pueda adherirse al receptor de la célula pulmonar, que es como un candado en el exterior de la célula pulmonar”.

La experta destacó la importancia del estudio, especialmente en el momento en que los casos de contagios se han incrementado en el mundo, que incluso ha llevado al retorno de algunas medidas restrictivas.

“Este estudio es único porque es la primera vez que los investigadores apuntan al receptor, el candado, con un extracto bacteriano y demuestran que protege contra la infección con virus vivos. Básicamente, estamos quitando el candado de la pared celular para que no haya nada a lo que pueda adherirse la llave del virus”, señaló.

Este análisis inició prácticamente desde el comienzo de la pandemia, cuando los profesores Donata Vercelli y Vadim Pivniouk (educador asociado de la Facultad de Medicina y el Departamento de Medicina Celular y Molecular de Tucson), junto a otros investigadores, recurrieron a los datos que recopilaron en un estudio de prevención del asma para determinar si el tratamiento con OM-85 afectó al receptor ACE2 y a la enzima involucrada en covid-19.

Eso permitió descubrir que el pretratamiento de las células con OM-85 impide la infección por SARS-CoV-2.

La investigación revela que “el mecanismo por el cual OM-85 previene la infección viral es diferente al de las vacunas o tratamientos con anticuerpos, que se enfocan en una proteína viral”.

Los expertos concluyeron que apuntar al receptor OM-85 puede cerrar la puerta que permite que el coronavirus infecte las células, lo que podría hacerlo efectivo contra cualquier variante que infecte a través del receptor ACE2.

“Nuestro sistema inmunológico innato ha evolucionado bajo presiones ambientales como las bacterias, pero nuestro estilo de vida actual a menudo no nos da la oportunidad de desarrollar esta inmunidad protectora”, indicó Vercelli.

Añadió que “la idea es usar lisado bacteriano para entrenar nuestro sistema inmunológico para que nos proteja de los virus, de la misma manera que aquellos que están expuestos regularmente a animales de granja están protegidos contra una multitud de bacterias y otros microbios”.

La investigación del Colegio de Medicina de la Universidad de Arizona y Tucson fue apoyada en parte por OM Pharma SA, BIO5 y por el Instituto Nacional de Salud Ambiental de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.