Una mujer en India tuvo que transportar el cuerpo sin vida de su hijo, fallecido por la covid-19, en un bicitaxi, pues la creciente ola de contagios en el país dejó sin ambulancias a muchas de las ciudades, al igual que sin camas UCI y oxígeno.
Al mismo tiempo, hay alertas sobre un gran número de personas que han recurrido al mercado negro de suministros médicos para aquellos pacientes que necesitan tratamiento, pues el país reportó 2.812 muertes por coronavirus este domingo y el número de contagiados creció hasta los 352.991 el lunes, un número récord en todo el mundo.
Allí normalmente un cilindro de oxígeno costaría una cifra cercana a los US$80 (6.000 rupias), pero quienes los venden aprovechan la situación y llegan a cobrar hasta US$1.300 (50.000 rupias) por cada cilindro.
Quienes no tienen los recursos para estos implementos mueren asfixiados, mientras que otros han optado por suicidarse arrojándose desde los techos en medio de la escasez de hospitales.
Para hacer frente a la crisis, el gobierno indio anunció este lunes que enviaría al Ejército para ayudar a abordar la segunda ola mortal que actualmente está colapsando el sistema de salud de la India.
Mientras tanto, un tren llamado ‘The Oxygen Express’, que transportaba 64,55 toneladas de oxígeno médico líquido (LMO) en camiones cisterna, partió hacia Delhi desde Raigarh el lunes, según contaron medios de ese país.
Se espera que con la llegada de estos suministros se verá aliviado el sistema de salud en Delhi, ciudad en la que se registraron 1.777 personas solo entre el 19 y el 24 de abril, una tasa de más de 12 muertes por hora, o una muerte cada cinco minutos.
El aumento de casos positivos en la India es preocupante. La nueva variante descubierta en el territorio ha elevado el nivel de contagios a tal punto de que los centros médicos están completamente colapsados. Cada vez es más escaso el oxígeno, los utensilios y el personal médico capacitado para enfrentar esta nueva y catastrófica ola.
“El virus se está tragando a la gente de nuestra ciudad como un monstruo”, dijo Mamtesh Sharma, funcionario del crematorio Bhadbhada Vishram Ghat en Bhopal, una ciudad en el centro de ese país.
La cantidad de cuerpos es tanta que se ha tomado la decisión de cremar los cuerpos a medida que llegan y en grandes cantidades, saltándose cualquier tipo de ceremonia y de rituales individuales, que son tradiciones en la cultura hindú. El Ministerio de Salud del país informó el domingo de otras 2.767 muertes en las últimas 24 horas, lo que eleva el creciente número de muertes del país a 192.311.
La situación en India, donde la pandemia está alcanzando niveles sin precedentes, es “más que desgarradora”, declaró el lunes el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS). “La OMS hace todo lo que puede, suministrando material y equipamiento esencial, sobre todo miles de concentradores de oxígeno, hospitales de campaña móviles prefabricados y material de laboratorio”, afirmó Tedros Adhanom Ghebreyesus en rueda de prensa.
En pocos días, la variante india sumió al gigante asiático de 1.300 millones de habitantes en el caos y varios países anunciaron que enviaban ayuda de emergencia. “La OMS desplegó más de 2.600 personas para apoyar la respuesta en el terreno, para aportar su apoyo a las actividades de vigilancia, a los consejos técnicos y a los esfuerzos de vacunación”, precisó el responsable de la OMS.
La organización también indicó en un texto transmitido a la AFP que estaba efectuando un análisis rápido de la situación en las zonas donde hay un recrudecimiento de los contagios, donde también formulaba recomendaciones y respaldaba la puesta en práctica de estas medidas.