Las vacunas contra la covid-19 no previenen todos los contagios y su efectividad se mide, sobre todo, por su capacidad para evitar casos graves del virus y decesos a causa de la enfermedad.

Sin embargo, muchos piensan que cuando reciben la vacuna ya no es necesario realizarse pruebas de coronavirus si presentan síntomas. La interpretación del Ministerio de Salud es que, como pasa con otros biológicos, como el del sarampión o la poliomielitis, los datos de ensayos clínicos y programas de vacunación en curso brindan la confianza de que las vacunas contra la covid-19 son suficientemente eficaces y seguras.

Julián Fernández, director de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud, aclaró que aún no hay ningún direccionamiento oficial de la cartera que respalde la decisión de no practicar pruebas a esta población. “Como muchos no han recibido la vacuna, en este momento el país no puede dar el salto de dejar de hacer pruebas a personas vacunadas. Tal vez más adelante, pero por ahora no”, sostuvo.

Según el funcionario, con la circulación de variantes como la delta en Colombia, hay un riesgo social altísimo acompañado de la debilidad en la intervención de las cadenas de contacto. Las entidades prestadoras de salud (EPS), por lo anterior, deben seguir realizando pruebas a todas las personas que presenten síntomas leves del virus, entre ellas quienes están completamente vacunadas contra el coronavirus.

“Hay discusión al respecto, pero reconociendo las nuevas variantes no se pueden dejar de hacer pruebas a personas vacunadas. Hemos tenido denuncias de personas vacunadas, incluso con síntomas, a las que las EPS les han negado la prueba. Si hacemos esto, corremos el riesgo de que estas personas generen nuevas cadenas de contagios”, aseveró Fernández.

En la actualidad no hay ningún direccionamiento internacional que indique que es seguro dejar de hacer pruebas a personas que ya han completado sus esquemas de vacunación. Incluso, de acuerdo con la guía más reciente de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., las personas completamente vacunadas que han estado cerca a un caso de covid-19 sospechoso o confirmado, deben hacerse a pruebas de 3 a 5 días después de la exposición al virus y usar tapabocas en lugares públicos cerrados durante 14 días o hasta que reciban un resultado negativo de la prueba.

El funcionario ratificó que el objetivo más grande la inmunización es reducir la mortalidad e incidencia de casos graves, lo que también ayuda en la reducción de los contagios, pero no significa que cuando una persona esté vacunada no pueda transmitir el virus.

Lo cierto es que cuando empezó la vacunación en el país, el Gobierno señalaba que el objetivo con las primeras etapas era reducir la mortalidad y posteriormente el contagio. No obstante, con el avance de la pandemia el panorama ha cambiado, así como la evidencia científica sobre la efectividad de las vacunas y el comportamiento del SARS-CoV-2.

Los CDC, resaltó el Ministerio de Salud, señalan que los nuevos datos muestran que las personas vacunadas infectadas con la variante delta pueden contagiar a otros. Las preguntas sobre la eficacia de las vacunas en la “vida real” son muchas, todavía no es claro qué tanto servirán en la protección contra delta durante la cuarta ola que se espera para octubre y qué tan alta es la protección contra los contagios.