Los científicos siguen con preocupación la propagación de la variante delta del coronavirus que se ha extendido a más de 100 países del mundo y que pone en riesgo los planes de vacunación para lograr la inmunidad de rebaño y la reducción de los casos de contagio.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que la nueva cepa ya es predominante en varios países, como la India, de donde es originaria, así como en el Reino Unido y Portugal.

La situación es tan delicada que autoridades sanitarias han advertido que “en algunas semanas o meses” la variante delta será la mayoritaria en toda Europa.

Ante este panorama se avanza en el estudio de la efectividad de las vacunas que han sido avaladas por la OMS contra la nueva cepa, teniendo en cuenta que esta puede escapar a algunos anticuerpos monoclonales de laboratorio.

De acuerdo con un estudio del Instituto Pasteur, encabezado por el investigador Olivier Schwartz y que fue publicado en Nature, con la aplicación de las dos dosis Pfizer o AstraZeneca se genera una respuesta neutralizante en el 95 % de las personas.

El análisis también indica que delta es menos inhibida por los anticuerpos presentes en las personas que han sido infectadas con el coronavirus o que han recibido una sola dosis de esos inmunizantes.

Para llegar a esa conclusión se estudió la reactividad de los anticuerpos monoclonales y de los anticuerpos del suero sanguíneo de 103 personas con una infección previa por SARS-CoV-2, y de 59 vacunadas con una o dos dosis.

Según los resultados del estudio, la variante delta es “menos sensible a los anticuerpos neutralizantes que la alfa” y sugiere que consigue escapar de los anticuerpos que se dirigen a ciertas partes de la proteína Spike, que es la que usa el virus para entrar en las células.

De acuerdo con la publicación, el análisis de la sangre de pacientes recuperados de covid-19 en los doce meses previos reveló que necesitan concentraciones de anticuerpos “cuatro veces más elevadas” para neutralizar la variante delta en comparación con la alfa.

Determinó además que una sola dosis de las vacunas Pfizer-BioNTech o AstraZeneca fue poco o nada eficaz contra las variantes beta y delta; solo alrededor del 10 % de los individuos fueron capaces de neutralizar la variante delta después de una dosis.

Como conclusión, se logró demostrar que la administración de las dos dosis de esa vacunas generó una respuesta neutralizante en el 95 % de los individuos, aunque es “de tres a cinco veces menos potente contra la variante delta en comparación con la alfa”.

Los autores del estudio también descubrieron que la vacunación de individuos con una infección previa por SARS-CoV-2 potenciaba la inmunidad por encima del umbral de neutralización de la variante.

La investigación analizó la eficacia de los anticuerpos monoclonales terapéuticos Bamlanivimab, Etesevimab, Casirivimab y Imdevimab.

Trabajadores médicos llevan en una camilla a un paciente sospechoso de tener virus a un hospital en Kommunarka, en las afueras de Moscú, ciudad altamente afectada por la variante Delta del coronavirus. (AP Foto / Alexander Zemlianichenko) | Foto: Copyright 2021 The Associated Press. All rights reserved.

De esos cuatro, el Bamlanivimab “perdía su actividad antiviral” al no ser capaz de unirse a la proteína Spike, mientras los otros seguían activos.

Para los científicos, las mutaciones presentes en la proteína Spike de la variante delta “potencialmente modifican la unión del virus al receptor de la célula, lo que le permite escapar parcialmente a la repuesta del sistema inmunitario”.

Transmisión de delta se mantiene “muy limitada” en las Américas

La transmisión comunitaria de la variante delta del coronavirus se mantiene “muy limitada” en el conjunto de las Américas, dijo la directora a la OPS, oficina regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“Si bien la variante delta ya se ha detectado en 15 países o territorios (del continente americano), hasta el momento se ha asociado principalmente a casos en viajeros”, señaló Carissa Etienne, titular de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

“La transmisión comunitaria de la variante delta sigue siendo muy limitada, mientras que otras variantes siguen predominando”, indicó, en alusión a alfa y gamma, detectadas inicialmente en Reino Unido y Brasil, respectivamente.

Delta, originalmente identificada en India, ya es la cepa dominante del virus de covid-19 en Estados Unidos.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), principal agencia de salud pública estadounidense, reportaron un 51,7 % de casos asociados a esta variante en las dos semanas anteriores al 3 de julio.

Etienne reconoció que delta ha ido en aumento en Estados Unidos y se está volviendo predominante en algunos estados, pero destacó que ese patrón puede no replicarse en el resto de la región.

“La situación en Estados Unidos no necesariamente permite predecir cómo afectará esta variante a otros países”, afirmó, al subrayar que la distribución de cepas de covid-19 siempre ha sido diferente entre los países americanos.

Según datos compilados por la OPS, al 6 de julio delta había sido detectada en Estados Unidos, Canadá y México, así como en cuatro países sudamericanos (Argentina, Brasil, Chile y Perú).

Ningún caso vinculado a delta había sido reportado en Centroamérica, pero sí se habían notificado contagios de esta cepa en el Caribe en Aruba, Barbados, Guayana Francesa, Guadalupe, Martinica, Puerto Rico, Saint Maarten y Saba.

“Es difícil en este momento predecir cuál será el impacto de la variante delta en nuestra región”, insistió Etienne.

Por eso, independientemente de la variante que prevalezca, llamó a tomar todas las medidas de salud pública que han probado ser eficaces para reducir la transmisión del virus, como el uso adecuado de mascarillas, el distanciamiento social, la higiene de manos “y, por supuesto, la vacunación”.

Según el último reporte de la OPS, alfa había sido identificada en 41 países americanos, gamma, en 27, y Beta (primero reportada en Sudáfrica), en 20.

La variante delta, cuyo nombre científico es B.1.617, se detectó por primera vez en la India en octubre del año pasado y ha sido descrita como altamente infecciosa.

Con información de la AFP.