Uno de los países del mundo que más vacunan contra la covid-19, Portugal, debe buena parte de su éxito al rigor y la sangre fría del oficial de marina a cargo de esta misión.

Aplaudido al llegar de visita a un centro de vacunación en la localidad de Seixal, en el sur de Lisboa, el vicealmirante Henrique Gouveia e Melo se convirtió en los últimos meses en un personaje popular.

“Hace un trabajo excelente (...) Es gracias a él que Portugal se volvió un buen alumno”, declaró a la agencia AFP Roseane Santos, quien acompañó a su hijo adolescente a recibir la segunda dosis de la vacuna.

“No soy más que la punta del iceberg”, aseguró con modestia este marino de 60 años, de físico imponente y barba gris.

Portugal, con el 80% de su población de alrededor de 10 millones de habitantes totalmente vacunada, está codo con codo con Malta como líder mundial en la inmunización contra la covid-19.

“Nosotros los portugueses (...) tenemos el sentido de comunidad cuando somos atacados. Habíamos sido atacados por un virus que destruyó nuestras vidas y reaccionamos de la mejor manera: unidos para vencer juntos esta pandemia”, dijo a AFP este exportavoz de la marina.

Polémicas e injurias

Sin embargo, la partida no estaba ganada cuando el militar fue nombrado en febrero como coordinador del equipo a cargo de la campaña de vacunación.

Su antecesor fue obligado a renunciar por una polémica en torno a las listas de personas con prioridad para ser vacunadas, en detrimento de los trabajadores de primera línea.

Tranquilizados con el rigor de un militar, los portugueses vieron cómo el vicealmirante Gouveia e Melo aguantó estoicamente las injurias que le lanzaron ante las cámaras de televisión activistas antivacunas.

“Tienen derecho a su opinión pero no a empujar o presionar a la gente”, respondió a una persona que lo trató de “asesino” en la entrada de un centro de vacunación.

Portugal, con el 80% de su población de alrededor de 10 millones de habitantes totalmente vacunada. | Foto: Copyright 2021 The Associated Press. All rights reserved

Después del incidente a mediados de agosto, cuando los adolescentes de más de 12 años comenzaron a ser vacunados, el oficial fue puesto bajo protección policial.

Y cuando los medios locales le vaticinan un futuro en la política, él descarta la idea y dice querer volver a su “anonimato” lo antes posible.

“Ganar la guerra”

“No me quitaré el traje de trabajo hasta que hayamos ganado la guerra”, prometió.

Portugal quiere alcanzar el 85% de la población plenamente vacunada para finales de septiembre y rebajar de nuevo las restricciones sanitarias.

Portugal, uno de los primeros países afectados por la contagiosa variante delta, controló la última ola de la pandemia acelerando su campaña de vacunación con hasta 100.000 dosis diarias.

Con el número de nuevos contagios a la baja después de varias semanas, el uso de mascarillas en exteriores dejó de ser obligatorio el pasado lunes.

Gouveia e Melo “fue capaz de tomar decisiones rápidas para acelerar el ritmo cuando fue posible”, explicó el economista Pedro Pita Barros, especialista en salud.

Pero su éxito se debe también a la confianza de los portugueses en su servicio de salud pública, que ya lo había convertido, antes de la pandemia, en uno de los países más vacunados del mundo, agregó este especialista de la New School of Business and Economics.

Al contrario de otros países, Portugal no contempla ofrecer una tercera dosis a personas de salud más frágil.

Con información de AFP.