La nueva variante de la covid-19, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha denominado ómicron, es uno de los temas que más preocupa a los gobiernos del mundo, teniendo en cuenta que tanto la organización internacional como las autoridades sanitarias de Sudáfrica (país en el que se detectó el primer caso de contagio con esta variación el pasado 9 de noviembre) no solo la tildaron como “preocupante”, sino que también la han catalogado como una de las más contagiosas que se han descubierto hasta la fecha.
Por esto, una de las mayores preocupaciones que tiene la comunidad internacional está directamente relacionada con la eficacia que puedan tener las vacunas que existen hoy en día en pro de contrarrestar los ataques de ómicron en el ser humano.
La mayoría de los expertos han asegurado que lo más probable es que, aunque presente alguna resistencia, los biológicos existentes hoy en el mercado podrán luchar contra los contagios en los que ómicron sea protagonista.
Sin embargo, existen otros especialistas, como el CEO (director ejecutivo) de Moderna, Stéphane Bancel, quien indicó que lo más seguro es que la eficacia de los inmunizantes presentará “una caída material” en los próximos días. Esto quiere decir que, según Bancel, sería necesaria la creación de nuevos biológicos cuyo fin principal sea contrarrestar los efectos del nuevo linaje de la covid-19 en medio de la pandemia.
Ahora bien, en las últimas horas, el presidente de la compañía, Dr. Stephen Hoge, tuvo que salir a aclarar estas apreciaciones, asegurando que “algunas de las palabras elegidas (por Bancel) pueden no haber sido óptimas”.
“Lo que creo que Stéphane intentaba decir era coherente con lo que (…) nosotros sentimos, que es que parece probable que la variante ómicron vaya a hacer mella en la eficacia de nuestra vacuna (Moderna), de hecho, en todas las vacunas. Esto nos lleva a creer que son nuestras experiencias anteriores, incluyendo la variante delta este verano, que creo que todos vimos que tuvo un impacto en la eficacia de la vacuna”, dijo Hoge en conversación con CNN.
Sin embargo, aunque admitió que ómicron tiene ciertas similitudes con delta y la variante que la precedió, beta, además de que las mutaciones presentes en esta variación pueden considerarse como una “posibilidad de escape inmunológico”, lo cierto es que aún es incierto decir o afirmar los niveles de inmunidad que tendrá la variante frente a la vacuna, o si en realidad la eficacia disminuirá de la forma en la que los más alarmados creen que pasará.
“Ahora bien, lo que no sabemos con certeza es cuán grande es esa mella, cuán grande es esa disminución de la eficacia de la vacuna. Nuestra esperanza, al menos en el caso de Moderna, es que sigamos viendo la mayor eficacia en general y que los refuerzos la aumenten aún más”, explicó.
Y concluyó diciendo que “el optimismo que hay en mí diría que quizá descubramos en las próximas semanas, a medida que ganaremos más datos en el mundo real, que las vacunas se mantienen bastante bien. Esto es más como delta, y es una situación en la que ya tenemos las herramientas que necesitamos para luchar”.
El mismo pensamiento tiene el cofundador de Moderna Inc., Noubar Afeyan, quien, en entrevista con Bloomberg Television, manifestó que, aunque esta es una situación que debe preocupar al mundo entero, tampoco es algo que debería afrontarse con tanto miedo, pues después de todo las vacunas que se tienen hoy en día son mucho más eficaces que las que se tenían hace año y medio.
“Tenemos armas mucho mejores para luchar que hace 18 meses”, indicó Afeyan.