Mientras en varios países avanzan los planes de vacunación contra el coronavirus que deja aproximadamente 4′311.740 de fallecidos y 203′639.591 de contagiados, científicos y autoridades sanitarias de cada nación son conscientes de que las vacunas contra el virus que han sido autorizadas para uso de emergencia brindan alta protección para prevenir complicaciones en la salud de los infectados.
Por lo tanto, hay un debate mundial sobre la posibilidad de que se empiece a suministrar una tercera dosis de la vacuna a modo de refuerzo, en grupos de personas en los que no se desarrolla una respuesta del sistema inmune tras recibir el esquema completo.
Países como Israel, Alemania, Reino Unido, Suecia, Tailandia, Chile y Uruguay que ya se mostraron a favor de la tercera dosis en algunos grupos de personas y, naciones como Estados Unidos y Argentina, están analizando cómo y a quiénes suministrarían la tercera dosis contra la covid-19.
De hecho, varios estudios científicos han indicado que no hay evidencias de que la tercera dosis sea una opción para aplicar en toda la población de un país y, la Organización Mundial de la Salud (OMS) también ha hecho un llamado de la solidaridad a algunos países para que no utilicen dosis como refuerzo, aún cuando solo el 30 % de la población mundial ha recibido la primera dosis.
Mientras el debate continúa abierto, un estudio publicado en la revista especializada Annals of Internal Medicine indicó que uno de los grupos para considerar como prioritarios para la tercera dosis contra la covid-19 serían las personas que han recibido órganos por trasplantes, teniendo en cuenta que a estos pacientes les suelen indicar medicamentos inmunosupresores para evitar que el cuerpo rechace al nuevo órgano, pero puede aumentar el riesgo de infecciones, como es el caso del coronavirus.
En línea con lo anterior, un estudio publicado en la revista JAMA de la Asociación Médica Estadounidense señaló que de 658 pacientes trasplantados que habían completado el esquema de vacunación, solo el 54 % de los que completaron la pauta de inmunización con vacunas de Pfizer/BioNTech o de la empresa Moderna desarrollaron anticuerpos que les conferían protección frente a la covid-19.
Otro estudio publicado en la revista The New England Journal of Medicine sugirió que el 68 % de los pacientes con trasplante de órganos generaron anticuerpos después de la administración de una tercera dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech, frente al 40 % al que se le inoculó la pauta de vacunación estándar (dos dosis).
Mientras aún es incierto qué pasará con la aplicación de la tercera dosis contra el virus, la Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA, por su sigla en inglés) se encuentra analizando estudios para establecer la conveniencia o no de una inoculación de refuerzo contra la covid-19 y proteger a pacientes inmunodeprimidos.
De tal modo, dicho organismo internacional está acelerando esfuerzos para autorizar dosis adicionales de las vacunas contra la covid-19 administradas en los Estados Unidos -Pfizer BioNTech y Moderna NIH- en pacientes inmunitarios debilitados.
Además, con la llegada de la variante delta del coronavirus, los expertos se han puesto a dudar sobre las conjeturas que inicialmente se habían hecho relacionadas con el número de vacunas necesarias para alcanzar la inmunidad colectiva.
Incluso, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que esta podría ser superior al 70 % no solo por el efecto de dicha variante hallada en India, sino también por la acción de sus homólogas, alfa, beta y gama, las cuales también tienen preocupados a los expertos en salud, pues han demostrado tener mayor capacidad de transmisión, con la leve probabilidad de reducir potencialmente la efectividad de las medidas recomendadas como protección de la pandemia.