La nueva variante de la covid-19, llamada omicron, fue clasificada como “preocupante” por la Organización Mundial de la Salud, en especial por su grado de resistencia a las vacunas, por sus características genéticas y por lo que está causando en Sudáfrica, donde apareció.
Desde el punto de vista genético, posee un número de mutaciones inhabitualmente elevado. Una treintena de ellas en la proteína spike, la llave de entrada del virus en el organismo.
Con base a la experiencia de las anteriores variantes, se sabe que algunas de esas mutaciones pueden conllevar una enorme capacidad de transmisión y una disminución de la eficacia de las vacunas.
“Si nos basamos en la genética, es cierto que hay algo muy particular que puede ser preocupante”, dijo a la AFP Vincent Enouf, del Centro Nacional de Referencia de virus respiratorios del Instituto Pasteur en París.
El otro aspecto preocupante: el número de casos y el porcentaje de covid-19 atribuido a esta cepa está aumentando de manera muy rápida en la provincia sudafricana de Gauteng (que comprendre Pretoria y Johannesburgo), donde fue detectado inicialmente.
Se necesitarán “varias semanas” para comprender mejor la nueva variante y saber si es más transmisible, más peligrosa y más resistente a las vacunas, destacó la OMS.
“Los virólogos - y yo me incluyo - estamos preocupados. Pero no creo que nadie pueda concluir que todo está en peligro, basándose únicamente en los datos que disponemos” añadió mediante un tuit la estadounidense Angela Rasmussen.
¿Es más peligrosa que la Delta?
Aunque esencial, nadie puede hasta el momento responder a la pregunta de si omicron es más peligrosa que la variante delta. Esa última es prácticamente hegemónica en todo el mundo gracias a sus características, que le permitieron sustituir a la alfa.
La delta es la más robusta y la más rápida de transmisión. Las variantes Mu o Lambda, que aparecieron en los últimos meses, no consiguieron arrebatarle esa posición. Al punto de que en las últimas semanas la mayoría de científicos pensaba que la próxima variante preocupante sería producto de una nueva evolución de la delta.
Sin embargo, omicron pertenece a una cepa completamente distinta. La situación en la provincia de Gauteng hace temer que esa nueva variante pueda sobrepasar a la delta. Aunque no se tiene la certeza.
“Puede suceder que un gran acontecimiento de supercontagio (un solo acontecimiento que provoca un gran número de casos) relacionado con el B.1.1.529 pueda dar la impresión falsa de que suplanta a la delta”, explica la especialista británica Sharon Peacock, citada por el organismo Science Media Centre.
Por otro lado, la nueva variante parece expandirse por toda Sudáfrica, lo que sería un signo más de su capacidad de rivalizar con la Delta.
El nuevo enemigo es fácil de detectar gracias a una característica genética que se puede identificar mediante un simple test PCR, antes de proceder a análisis más profundos.
¿Puede impedirse su expansión?
Menos de 24 horas después de la presentación del variante por parte de las autoridades sudafricanas, varios países europeos suspendieron los vuelos provenientes de África austral.
Pero Bélgica ya anunció el primer caso en el continente. Se trata de una persona no vacunada que viajó al extranjero.
Suspender los vuelos “es una medida que permite frenar” la expansión de una variante muy contagiosa “pero no permitirá nunca interrumpirla completamente”, indicó Enouf, que recordó los precedentes de alfa y delta.
Algunos científicos piden cerrar las fronteras con esos países lo antes posible como medida de precaución, para luego volverlas a abrir si se disipan los temores.
Otros expertos consideran una medida de ese tipo dañina para Sudáfrica y Botsuana, otro país que ha documentado esta nueva variante. Temen que eso disuada a otros países de hacer pública la aparición de otras variantes en el futuro. La OMS también ha desaconsejado por el momento restringir los viajes.
¿Qué impacto tiene sobre las vacunas?
Por el momento no se puede afirmar que esta nueva variante reducirá la eficacia de las vacunas, aunque todo lo hace temer. “Hay que verificar si los anticuerpos producidos por nuestras vacunas actuales siguen funcionando, hasta qué nivel y si ello impide los casos graves”, explica Vincent Enouf.
Para ello se están llevando a cabo pruebas de laboratorio y a partir de los datos reales en los países concernidos. El laboratorio alemán BioNTech, aliado con Pfizer, espera los primeros resultados “a más tardar dentro de dos semanas”, indicó una portavoz a la AFP.
“Es urgente adaptar las vacunas de ARN y las dosis de refuerzo a las variantes en circulación”, estimó en Twitter el virólogo francés Etienne Decroly.
La vacunación sigue siendo a pesar de todo esencial. Al igual que el acceso de los países pobres a las vacunas, insisten los científicos.
“Cuanto más circule el virus, más evolucionará y más mutaciones veremos”, advirtió una de las responsables de la OMS, Maria Van Kerkhove.
*Con información de AFP.