El fraude con tarjetas de crédito sigue siendo uno de los grandes dolores de cabeza de los clientes de establecimientos de crédito. Existen diferentes modalidades, entre las más comunes, la clonación del plástico, la llamada para pedirle sus datos personales para hacer compras no autorizadas. De acuerdo con estadísticas de Nilsen en un reporte a 2016, citadas en un artículo por BBC Mundo, en 2015 se generaron más de $31.000 billones de pagos con tarjetas en todo el mundo, una cantidad 7,3% mayor a la de 2014. El comercio electrónico ha permitido una mayor aceptación de las tarjetas por parte de los consumidores, pero como ocurre con estos medios de pago, hay criminales que están a la caza de datos para cometer fraudes. Los datos de Nilsen concluyen que las pérdidas mundiales por fraude con tarjetas se elevaron a más de $21.000 millones de dólares en 2015, frente a los $8.000 millones de 2010. Los expertos calculan que esta cifra superará los $31.000 millones de dólares para 2020. Y usted debe ser la primera barrera de contención para no caer en la trampa de una estafa con sus tarjetas. Un reporte de la Superintendencia Financiera con corte a abril de 2017 señala que en las billeteras y carteras colombianas hay 14.777.919 plásticos de diferentes franquicias de crédito. Con este medio de pago se hicieron 14.992.174 compras por un valor de $3,06 billones y 2,8 millones de avances por un valor de $1,36 billones. Eso da una compra promedio de $204.000 por tarjeta de crédito. Siga leyendo Las entidades financieras más caras y baratas, según la tarjeta de créditoPor eso no puede perder de vista su tarjeta y no hay que entregar los datos de seguridad a la primera llamada. Los ladrones están a la espera que usted se descuide para abrirle un agujero a sus finanzas. Basta con recordar que hace unas semanas, varios clientes se quejaron por la supuesta defraudación con sus tarjetas al hacer pagos en una cadena de gimnasios de Bogotá. Los testimonios apuntaban a que, sin tener idea de lo que pasaba, les habían hecho varias compras por miles de dólares en el exterior. Aunque la Ley protege en algunos casos a los consumidores que fueron víctimas de una clonación, lo mejor es que usted sea la primera barrera de contención. Según PlaceToPay, proveedor de soluciones electrónicas de pago, la prevención es responsabilidad de todos los actores de la cadena: proveedores, usuarios, compañías, entidades financieras y legisladores. Para eso, es importante tener el protocolo PCI DSS (Payment Card Industry Data Security Standard), la más alta certificación en seguridad de la información.Ante la ola de presuntas clonaciones, estas recomendaciones son de aplicación tanto para los comercios, como para los consumidores: Las marcas deben ser responsablesAl momento de contratar una plataforma de pagos, se debe verificar que esta cuente con la certificación PCI DSS vigente (validez por un año). El único documento para demostrar cumplimiento es el AOC (Attestation of Compliance for Onsite Assessments – Service Providers). No capture datos de las tarjetas de crédito de sus clientes en sistemas que no cumplan con esta norma. Delegue esta tarea en un tercero certificado.Tenga en cuenta que esto también aplica si hace ventas telefónicas o en sistemas POS (Point of Service). Un dispositivo vulnerable puede contaminar toda la organización. Le contamos ¡Pilas! No pierda su dinero por fraudes que le hagan con su tarjeta de crédito o débitoLos usuarios deben tener en cuenta:No utilizar conexiones Wi-Fi de dudosa confiabilidad: Elija redes protegidas por contraseña. Revise que la página web a la que está accediendo sea segura. El ícono del candado es uno de los elementos que ayuda a identificar las páginas confiables aunque no es lo único que debemos comprobar. Verifique que la tienda virtual o el proveedor de pagos esté certificado en PCI DSS. Actualice su sistema y aplicaciones. Esto le permitirá estar protegido, porque los proveedores de seguridad han corregido posibles amenazas.Se recomienda escribir la dirección de la página web en el navegador y verificar que la oferta exista.Mantenga siempre sus claves de forma segura, no las repita ni use para diferentes cuentas.No envíe sus contraseñas a través de correos electrónicos ni mensajes de texto.
Finalmente PlacetoPay indica que de forma constante personas naturales y jurídicas están obligadas a actualizarse, a informarse, a revisar qué están comprando y cuáles son las garantías de la plataforma, la marca y el sitio web para hacer una compra segura. Los compradores deben estar pendientes para no entregar datos personales en sitios que no ofrezcan garantías de seguridad. Las tarjetas virtuales, otra forma de protecciónDe acuerdo con cifras de la Superintendencia Financiera de Colombia, los robos y fraudes a través de los distintos canales de las entidades pueden acercarse a $300.000 millones (unos $95 millones de dólares). También se estima que el 70% de estas pérdidas proviene del fraude cometido con tarjetas de crédito en pagos presenciales y en transacciones realizadas por internet. De acuerdo a un reporte de Veritran, compañía de servicios en banca digital, las entidades financieras están en la búsqueda de herramientas que les permitan hacerle frente a esta problemática y brindar un servicio mucho más seguro. Es aquí donde aparecen soluciones como las tarjetas virtuales, que permiten la generación de datos dinámicos que sirven únicamente para realizar transacciones por un tiempo determinado que en caso de no ser utilizada para la acción específica para la que fue creada, se vence y no permite realizar la compra. De esta manera los datos originales del cliente nunca estarán expuestos evitando fraudes y posibles clonaciones.Le tenemos Las 4 señales que le avisan que su tarjeta de crédito no es la adecuada