Sin duda alguna los emprendimientos colombianos están sonando fuertemente a nivel mundial y están alcanzando grandes hitos en el mundo. Un ejemplo de ello son los recientes logros alcanzados por Finsocial, la fintech colombiana de alto impacto dedicada al otorgamiento de créditos de consumo. En la última semana este emprendimiento creado por Santiago Botero en junio de 2012 en Barranquilla y enfocada en ofrecer soluciones financieras de bajo riesgo apoyadas en la tecnología a través de la modalidad de libranza y crédito de consumo a pensionados y maestros del sector oficial, recibió dos grandes noticias que aportarán a su crecimiento y consolidación. La primera de ellas es que logró entrar a las grandes ligas del emprendimiento ingresando a la red de emprendedores de Endeavor. Esto la convierte en la primera empresa de la región Caribe en ingresar a esta prestigiosa red de emprendedores que fomenta el desarrollo económico sostenible y la transformación de las economías emergentes identificando y apoyando emprendedores de alto impacto.
“Comparto totalmente la filosofía de Endeavor. Ahora, al convertirnos en Emprendedores Endeavor, contamos con una base mayor para ayudar a otros emprendedores a crecer. Es una responsabilidad muy grande, siempre he querido ayudar a las personas y qué mejor forma de hacerlo que retribuyendo lo que yo mismo he aprendido en el camino del emprendimiento”, afirmó Botero. La segunda noticia, que no solo es un gran paso para esta fintech, sino también para el ecosistema emprendedor colombiano, es la financiación que recibirá de Morgan Stanley, uno de los bancos más grandes del mundo. De acuerdo con Botero, en total la compañía recibirá US$125 millones ($425.000 millones) en dos tramos: el primero por un valor de US$75 millones y el segundo por un valor de hasta US$50 millones. Dicha operación es la más grande registrada en el país para un originador de crédito no regulado. De igual manera, se convierte en un espaldarazo a la trayectoria y proyección empresarial de Finsocial, impulsando el crecimiento de la originación de nuevos créditos de libranza a razón de unos US$10 millones por mes, casi el doble de la originación actual.
“Pasar al estanque significa para Finsocial ocupar una posición de privilegio para ser vista por los bancos internacionales y los fondos de inversión más importantes; para emitir bonos en Estados Unidos, etc. Es, además, un sello de garantía que valida los estándares de operación de Finsocial; un banco de estas dimensiones solo otorga este tipo de empréstitos si toda la operación cumple con las más exigentes condiciones de funcionamiento y pulcritud”, expresó el CEO de Finsocial. Botero afirmó que esta operación tiene como objetivo robustecer la capacidad crediticia de Finsocial. Este año la firma espera cerrar con una cartera superior a los $450.000 millones, cifra que planea incrementar en el 2020 para llegar a los $700.000 millones.
La firma colombiana tiene su base en Barranquilla y opera en 21 departamentos del país con 30 oficinas y más de 300 colaboradores. En el 2018 la compañía originó créditos por más de $182.000 millones y logró una utilidad antes de impuestos de $10.731 millones.