La situación del hambre en el mundo se está poniendo cada vez peor, con casos complejos como la crítica coyuntura que vive Venezuela o en la realidad que registra la mayoría de las regiones de África, el continente con mayor prevalencia de desnutrición. Por otro lado, el cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos están, según los hallazgos que ha hecho la FAO, entre los factores que inciden en el reciente aumento del hambre en el mundo. Relacionado: Pobreza extrema en Latinoamérica llegó a su nivel más alto en casi 10 años Estos acontecimientos afectan la productividad agrícola, lo que deriva en la reducción de disponibilidad de alimentos, alzas en los precios y pérdidas de ingresos en poblaciones que reduccen su acceso a los alimentos. A falta de adaptación, se espera que la situación empeore a medida que las temperaturas aumenten.
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