El próximo mes de mayo será subastada una fotografía tomada por el lente del artista estadounidense Emmanuel Radnitzky. De acuerdo con el portal web de la casa Christie’s, la instantánea de May Ray tendrá un nuevo dueño que pague por ella; se pretende recaudar entre 5 y 7 millones de dólares (más de 15.000 millones de pesos colombianos).
Si el material es comercializado, pasará a convertirse en la fotografía más cara del mundo. Con el nombre de ‘Le Violon d’Ingres’ (El violín de Ingres), Radnitzky espera captar el amor de los espectadores por la práctica visual. Retrata la imagen de una espalda desnuda de la amante de Man Ray, como comúnmente se le conoce, Alice Ernestine Prin o Kiki de Montparnasse en 1924.
Su composición es a escala de grises, colores a blanco y negro, un contraste que muestra lo más oscuro y claro en el retrato desnudo. Sin embargo, esta es una retoma de la primera fotografía, ya que la espalda de Kiki tiene dos marcas de aberturas de un violín; fueron dibujadas en la modelo, se tomó la fotografía y luego Radnitzky volvió a fotografiar el resultado inicial.
Esta obra hace alusión a las curvas que tiene el violín y las asemeja con las de la mujer. Podría decirse que el cuerpo es un instrumento musical que transmite sonidos y melodías.
Para Darius Himes, jefe internacional de fotografía de la casa de subastas Christie’s, que tiene alrededor de 53 oficinas en 32 países del mundo, El violín de Ingres es “una de las obras más icónicas del siglo XX. Esta imagen surrealista, seductora, es el resultado de un proceso de cuarto oscuro único y manipulado a mano”, menciona el experto en arte visual.
“El alcance y la influencia de la imagen, a la vez romántica, misteriosa, pícara y juguetona, ha capturado las mentes de todos durante casi cien años. Como obra fotográfica, no tiene precedentes en el mercado”, agregó Himes.
Desde 1962 Le Violon d’Ingres estuvo en las manos de Rosalind Gersten y Melvin Jacobs, pero la dupla ya le dijo adiós a este mundo.
Por ahora, la pieza fotográfica más costosa en la historia es Rhein II, de 1999 y elaborada por Andreas Gursky. En 2011 fue vendida por Christie‘s en 4,3 millones de dólares (más de 12.000 millones de pesos colombianos).
Cyanne Chutkow, vicepresidenta de Christie’s, arte impresionista y moderno, dice que la obra será parte de una colección: “Nos sentimos honrados de ofrecer esta colección especial compuesta por una diversidad de obras de arte de artistas surrealistas europeos y estadounidenses, a quienes los Jacobs sentían como almas gemelas, y muchos de los cuales defenderían profesionalmente cuando los artistas estuvieran en apuros financieros”.
Por su parte, Peggy Jacobs Bader, la hija de los propietarios Rosalind Gersten Jacobs y Melvin Jacobs, comento: “Mis padres tenían una estrecha amistad con varios artistas surrealistas extraordinarios, sobre todo Man Ray, Marcel Duchamp y Bill y Noma Copley. Ellos introdujeron a Roz y Mel al surrealismo y a otros miembros de esa comunidad creativa, quienes abrazaron de todo corazón a estos dos minoristas de moda jóvenes y creativos. Los artistas fueron mentores que no solo inspiraron y guiaron a mis padres, sino que también, esencialmente, fueron fundamentales en la curaduría de la colección. La adquisición de casi todas las piezas tiene una historia única e íntima detrás. El espíritu alegre de la relación de mis padres con los artistas se refleja en las obras que acumularon. Al ver la colección, uno tiene una sensación visceral del amor de mis padres por el surrealismo, su ojo perspicaz para el gran arte, su alegría y, a veces, su picardía”, aludió.