Si hay algo que se puede decir de la vida es que no es fácil. Cada persona tiene sus dificultades, sus buenos momentos, pero también los malos y desafiantes. En los buenos se le agradece al Señor, pero en los malos se le piden fuerzas y que sea esa ayuda y protección que se necesita para afrontarlos.

Es aquí cuando la Biblia se vuelve un libro con la palabra de Dios en sus páginas y una guía para saber, que por difícil que sea el camino y se pierda la fe, Dios no abandona y guía para volver a encontrar la luz. Uno de estos es Efesios, capítulo 6 versículos 10 al 18.

Para el creyente Dios es su provisión. | Foto: Getty Images

Escucharla en misa o leerla puede convertirse en una protección para esos momentos difíciles. Según las interpretaciones de los expertos, esta es un escudo de Dios, son las herramientas que le brinda el Señor a fieles para que luchen en las guerras espirituales y salir victorioso.

La página de la biblia dice lo siguiente: “Efesios 6 es el último capítulo de la carta de Pablo a los Efesios y en los versículos 10 al 18 él los anima a permanecer firmes en el Señor. Él sabía que, como cristianos, nos enfrentamos a una guerra espiritual intensa y debemos estar preparados. Pablo habla sobre la armadura de Dios, las herramientas que Dios da a sus hijos para que podamos vencer los ataques del diablo”.

Ilustración de oración. | Foto: PonyWang

Efesios 6:10-18

10 Por último, fortalézcanse con el gran poder del Señor.

11 Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo.

12 Porque nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales.

13 Por lo tanto, pónganse toda la armadura de Dios, para que cuando llegue el día malo puedan resistir hasta el fin con firmeza.

14 Manténganse firmes, ceñidos con el cinturón de la verdad, protegidos por la coraza de justicia,

15 y calzados con la disposición de proclamar el evangelio de la paz.

16 Además de todo esto, tomen el escudo de la fe, con el cual pueden apagar todas las flechas encendidas del maligno.

17 Tomen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios.

18 Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alerta y perseveren en oración por todos los santos.