Se va a los cortos buscando propuestas que, con su voz y mirada, revelen una intención artística que emocione y agite. Y lo que se vio ayer en el Programa de cortos colombianos 2 del FICCI 63, que se desarrolla esta semana en Cartagena y en el que estamos presentes, dejó una grata impresión.
Vale recordar que, en 2022, en FICCI vimos por primera vez el trabajo de Juanita Onzaga, como parte de la selección de los cortos que cerró el evento. Y esta exposición desató una indagación sobre su obra anterior y futura. Ahora, en 2024, dos años después, la vemos a Onzaga traer a FICCI su experiencia en realidad virtual Floating With Spirits, que, más allá de unos inconvenientes técnicos en cortos apartes, es nada menos que alucinante, literalmente. Todo esto para decir que exponerse a los cortos es exponerse a un presente y a proyectar un futuro.
A juzgar por estos cinco muy buenos cortos, se puede decir que el germen del cine nacional goza de buena salud. Y parece que el Programa de cortos colombianos 1 está igual de bueno. Lastimosamente, en estos eventos de tan intensa e interesante programación, se ve lo que se puede ver, no todo lo que se quiere ver. Y lo que se vio, fue el Programa 2, y valió la pena hacerlo.
Los cinco realizadores que integran esta selección se acercan en mayor o menor medida a sus primeros largometrajes. Para algunos como Leinad Pájaro De la Hoz, es su tercer corto; para una directora como Sofía Camargo, es su segundo, y para directoras como Andrea Muñoz y Daniela Riascos, es la primera entrega. Pero nada aquí sucede desde el afán, para ninguno, porque todos alimentan su voz a su ritmo, siguiendo su proceso.
Como un espectador que pretende hacer difusión, también se va a ver este cine desde la curiosidad del trabajo que vendrá. Y, la mayoría de casos, la intriga queda abierta sobre cómo serán esos próximos pasos de estos creadores. Sin embargo, vale centrarse en lo presente, en los cinco valiosos cortos que presentaron ayer en el TAM y que vuelven a presentar este sábado 20, en Cine Colombia Bocagrande, a las 2:20 p.m...
Estos fueron los cortos, en su orden de proyección, ayer, en el Teatro Adolfo Mejía (las sinopsis fueron escritas por integrantes del comité de selección).
Cuerpo de esta sombra, Andrea Muñoz Álvarez
Sinopsis de María Antonia Álvarez: Entre un pueblo de cuerpos adormecidos, una mujer es raptada por una gran sombra de cuatro patas. Más allá de los maizales se encontrará con otros cuerpos que observan, se mueven y se mezclan. Cuerpo de esta sombra es una invitación a levantar la mirada y encontrarnos con nuestra naturaleza íntima, instintiva. Provoca preguntarnos qué sucede cuando se rompen los bordes que delimitan un cuerpo, ¿puede ser una masa en movimiento, una sombra, o quizás una vaca?
Nuestra opinión: Esta propuesta de animación experimental transmite una sensación muy orgánica, corporal, terrenal, desde una frecuencia particular de ritmos y cuerpos en tránsito. Su directora mencionó haber trabajado con Carla Melo Gampert en La Perra, y si bien aquí la inquietud es otra, se les siente parte de una corriente.
Un pajaró voló, Leinad Pájaro De la Hoz
Sinopsis de Beto Rosero: Recientemente galardonado en la Berlinale con el premio especial del jurado en el programa Generation 14plus, este cortometraje dirigido por Leinad Pájaro de la Hoz, refleja sus propias experiencias de duelo por la pérdida de su padre, un destacado deportista colombiano. Esta obra explora la masculinidad, el luto y la necesidad de seguir adelante en la vida de Boloy, un joven jugador de la selección cubana de voleibol quién está atormentado por la ausencia de un amigo.
Nuestra opinión: Ya lo habíamos visto, ya sabíamos del golpe emocional que acarreaba, pero no por eso dejó de ser emocionante verlo en gran formato, con gran sonido, en su verdadera dimensión. El sonido es un protagonista, así como lo es Yasser Boloy, quien entrega una sentida interpretación de alguien paralizado por un duelo en búsqueda de ese momento de poder romper en llanto, asumir la pérdida, y seguir adelante con su vida.
Nostos, Sofía Camargo
Sinopsis de David Montenegro: A las afueras de Bogotá, Juana, una niña de 7 años, observa cómo se desvanece su mundo tal y como lo conocía con el embarazo de su madre. Su curiosidad y rebeldía la llevan a refugiarse en el bosque, llevándose con ella un conejo recién nacido. Nostos es el segundo cortometraje de Sofia Camargo, donde explora la inocencia y juega con imaginarios sobre la maternidad, pero deja también entrever los dilemas de las clases sociales y la complejidad de las relaciones familiares.
Nuestra opinión: Una película sencillamente dura, en la que vemos a una pequeña emocionalmente desplazada por el embarazo de una hermanita que llegara. La pequeña, como siente que su madre lo hace con ella, trata de “aconductar” a un conejito, que se lleva al bosque, donde crea un pequeño micro mundo que siente que puede controlar. Pero, tal como su madre con ella, fracasa en el intento.
Burbuja, Daniela Riascos
Sinopsis de Juan Pablo Melo: La burbuja es perfecta hasta que se rompe. Daniela Riascos sitúa esta historia de una adolescente, su familia y su pequeño grupo de amigas desde una posición que transparenta las presunciones de quienes parecen tenerlo todo. La forma en la que las protagonistas se expresan, piensan y se relacionan con su entorno, deja en evidencia la manera en que parte de una clase social entiende e imagina el país.
Nuestra opinión: En la Toyota Burbuja de una de ellas, que antes era muestra de poder y ya para ese entonces se está cayendo a pedazos y simboliza una cultura de dinero fácil, se le da voz a un grupo de amigas, unas con más plata que otras, mientras sucede una tragedia en la ciudad y, entre ellas, surgen tensiones típicas de la edad (pero no por eso menos intensas o importantes de tocar) y del momento en que deben proyectarse hacia la universidad .
Mi demonio, Rossana Montoya
Sinopsis de Adriana Arjona: A través de un extraordinario plano secuencia de 17 minutos, acompañamos a una joven y disfuncional pareja que está por tener su primer hijo. En el recorrido hacia el hospital, los dolores de parto se mezclan con reclamos mutuos, y las llamadas de los familiares suman comentarios imprudentes a una situación más que desesperada. Un bebé llega a la vida, al tiempo que el amor de Eva y Jacobo agoniza.
Nuestra opinión: Una brutal descarga de cine, un plano secuencia que transmite el caos y la zozobra de una pareja inestable al borde de traer una nueva vida al mundo. Difícil olvidar esta experiencia que, además de ese viaje hacia el hospital, que parece nunca se acabará, luego lanza a los personajes a una ruleta rusa en la clínica que los acoge. Y se respira algo, al final se respira... algo.