Camilo Torres: el amor eficaz

Director: Marta Rodríguez y Fernando Restrepo

Año: 2022

País: Colombia

Duración: 71 min.

La documentalista es una de las últimas personas que conocieron en vida a Torres,

El documental plantea un diálogo entre la directora de Los chircales y el ícono polarizador Camilo Torres, en la voz del codirector y guionista Fernando Restrepo, y el ejercicio funciona arrolladoramente. La documentalista (el título que más la enorgullece) es una de las últimas personas que conocieron en vida a Torres, abatido en marco de guerra a los 37 años, y define su propio camilismo sin violencia.

Esta precursora ha resistido desde la imagen contra los que han tratado evitar que refleje en pantalla el país crónicamente azotado por desigualdades forzadas y violencias sistemáticas; flagelos además recrudecidos por el narcotráfico, un factor que Camilo Torres jamás hubiera podido imaginar o dimensionar, y eso se explora en esta película, que también se apoya en un gran archivo hilvanado, contexto y pocas voces pertinentes y canciones. Se ha escrito todo sobre el cura que se fue al monte, pero aquí no traduce ese material en la pantalla, se juega a dejar claro que Rodríguez, quien conversa con el muerto, es la estrella que perdura y tiene mucho más por decirles a los vivos.

Cantos que inundan el río

Director: Luckas Perro

Año: 2021

País: Colombia

Duración: 72 min.

El canto llega donde espiritualmente debía estar, del lado de las víctimas y de sus almas.

Esta película, dirigida con enorme sensibilidad y sensible capacidad de visualización de parte del antropólogo, guionista y realizador Germán Arango (Luckas Perro), sigue a Ana Oneida Orejuela Barco y a las comadres con las que multiplica su voz y sus cantos desde el territorio que fue azotado por la barbarie, Bojayá. El documental refleja cómo, por los horrores vividos, Oneida decidió darle a una expresión ancestral del pueblo negro unas dimensiones más amplias.

Así convirtió el alabao, ese ritual de despedida fúnebre ancestral, en un clamor y una expresión de memoria y de dolor por lo ocurrido. El canto llega donde espiritualmente debía estar, del lado de las víctimas y de sus almas. Se sigue a Oneida componer estos cantos, también a sus comadres irlos aprendiendo y replicando; se las escucha a todas, en una multiplicación de voces que conmueve hasta los huesos. Y, por estos detalles, no se trata de un documental ni lineal ni predecible, demuestra un ejercicio de guion profundo, investigado, que ofrece una poesía brutal sobre la selva, los ríos chocoanos y los hechos incontestables y sus impactos.

Amparo

Director: Simón Mesa Soto

Año: 2021

País: Colombia

Duración: 95 min.

Amparo es esa mujer retada por todos, de quien todos quieren aprovecharse, de quien se ríen por la situación que enfrenta, especialmente las autoridades.

La ópera prima de Simón Mesa Soto se estrenó en la Semana de la Crítica en Cannes en 2021 y ahora les llega el turno a las salas del país que refleja. En los años noventa, sigue a una madre que asume una frenética odisea para evitar que su hijo, que cree débil, a quien los militares sorprendieron sin libreta, vaya a prestar servicio militar en el Caquetá. La actriz natural Sandra Melissa Torres entrega un papel casi perfecto en el protagónico, que le mereció el reconocimiento a mejor interpretación en Francia.

Amparo es esa mujer retada por todos, de quien todos quieren aprovecharse, de quien se ríen por la situación que enfrenta, especialmente las autoridades. Atropellada por la demente maquinaria de plata que significa ‘normalizar la situación militar’ del joven y hasta por su madre, Amparo se lleva donde ve que se hace necesario ir. Todo mientras personajes como Karen, su hija menor, prueba sus valores, cariños y rebeldía justa. Amparo no es perfecta, está lejos de eso, pero a la hora de decidir qué línea cruzar (porque le toca), escoge la que la daña solo a ella. Se estrena el 28 de abril.

La roya

Director: Juan Sebastián Mesa

Año: 2021

País: Colombia

Duración: 85 min.

En esta película, Jorge cuida de su tierra y de su abuelo viejo y enfermo.

La segunda película del director de Los Nadie juega en registros mucho más simbólicos que abrazan al campesino en su complejidad. Sigue a Jorge, un caficultor que se quedó en su tierra, a diferencia de todos sus compañeros de clase, que se fueron a buscar vidas fuera del pueblo. Jorge cuida de su tierra y de su abuelo viejo y enfermo (su compañía y su desvelo en esa finca), y quiere recuperar los terrenos que algunos le arrebataron a su padre (ausente, muerto).

Hay un arraigo que lo ancla, y de eso se va a dar cuenta en su debido tiempo, cuando sus compañeros regresan y plantean una tremenda fiesta de reencuentro. En esos montes empinados y en esos cafetales olvidados por todos menos él, a Jorge lo acompaña Rosa, una mujer que responde sus silbidos, con la que a escondidas tiene sexo, que habita estas veredas con su padre y madre; lo quiere, pero sabe que él no. Él se quedará, ella se irá. La roya llega a los cultivos porque ya está dentro de él, pero no tiene que quemarse hasta el final. Otros estados de consciencia son los que terminan operando aquí para ratificarlo en su sitio y liberarlo de sus fantasmas.