Como presidente de Venezuela, el fallecido Hugo Chávez dividió la opinión pública en bandos irreconciliables. Fue una figura con muchas facetas, con un carisma innegable, así como comportamientos y decisiones cuestionables. Pasó a la historia por su carrera política y por 14 años de gobierno que marcaron el futuro de los venezolanos.Su historia, fascinante desde cualquier punto de vista, fue la base de partida para la realización de una serie, producida por Sony, llamada ‘El Comandante’. Semana.com habló con Andrés Parra, el actor colombiano que en otro tiempo le dio vida a Pablo Escobar en El patrón del mal y quien ahora interpreta a Hugo Chávez. El productor de la serie, el analista Moises Naím, dijo sobre el trabajo del artista caleño: “es extraordinaria la manera como él ha entendido a Chávez, los gestos, las entonaciones, su forma de moverse. Es realmente espeluznante el parecido”.Antes de hacer este personaje se negó a interpretar nuevamente al fundador del Cartel de Medellín para la serie Narcos de Netflix, y aseguró que la idea de hacer el papel de ‘El Chapo’ Guzmán tampoco está en sus planes, pues no desea interpretar papeles que lo encasillen.Le recomendamos: “Yo ya no era Andrés, sino Pablo Escobar”Semana.com: ¿Por qué decidió aceptar el papel de Hugo Chávez?Andrés Parra (A.P.): Más que aceptarlo fue un regalo que me llegó. Después de interpretar a Pablo Escobar estaba pensando en darle vida a otro personaje que hubiera sido parte de la historia, que hubiera sido conocido, complejo y polémico. Pensé que alguien que permitía una exploración interesante era Hugo Chávez. No era un gran conocedor de él, ni de su historia, ni de su paso por el poder. Pero intuía que podía haber un personaje muy poderoso, muy profundo, lleno de matices; que podía cumplir eso que vengo buscando que es incomodar, generar preguntas, generar reflexiones. No fue que lo decidiera, más bien lo agradecí.Semana.com: ¿Cómo se preparó para personificar al mandatario venezolano? A.P.: Yo tengo ya más o menos definida una metodología de trabajo. Leo sobre el personaje, no solo biografías, sino también escritos especializados en política, economía, geopolítica, textos de algunos críticos, otros textos a favor y en contra. Para Chávez los textos de Bolívar fueron una lectura obligada. Tuve acompañamiento al principio por parte de Sony con charlas con periodistas e historiadores venezolanos que nos empapaban sobre el fenómeno de Venezuela, sobre la guerra de la independencia, el culto a Bolívar… como para que entendiéramos dónde nos estábamos parando.Hice tres diarios de trabajo: Uno en el que está la personalidad y gestualidad de Chávez. Otro que es histórico y político. Y otro donde está el desglose de la serie para saber en qué momento va el personaje. Eso me llevó a conocer 10 Chávez distintos que van mutando y se van transformando. Todos los días veía ‘Aló presidente’. El elenco venezolano me ayudó mucho con palabras, frases y refranes.Puede leer: “Hugo Chávez simboliza una oportunidad perdida de mejorar la situación en Venezuela”Semana.com: ¿Dentro de ese proceso que fue lo más difícil?A.P.: El proceso finalizó con Magda Niño, que es mi maestra de voz, y quien me ayudó a volver a activar el aparato respiratorio, los intercostales y el diafragma. Era un personaje que exigía no sólo una voz particular, sino además una voz muy potente. Yo no podía darme el lujo de quedarme sin voz en cada día que tuviéramos escenas de discurso. Los discursos de Chávez tienen un poder inmenso. La voz fue el reto más grande porque necesitaba que mi voz aguantara porque hablamos de un personaje con una voz muy poderosa.Semana.com: ¿Cambió su forma de pensar con respecto a Chávez después de hacer esta serie? A.P.: No me cambió mi visión de Chávez porque no tenía una percepción profunda de él. Lo que sí cambió fue mi visión de la política. Así como salí de algún proyecto con una consciencia mucho más grande del país en mi cabeza, ahora salgo con muchas más preguntas con respecto al mundo de la política. El mundo de la política es muy complejo, donde se mueven cosas que uno ni se imagina. Me cambió mi percepción de lo que busca el político, del manejo del poder, de esa relación poder-pueblo, y esa relación poder-poder. Ha sido una escuela. Salgo más político y soy más apasionado. Los actores de esta serie somos un poco menos ingenuos y un poco más peligrosos para ese sistema.Semana.com: Dijo que Chávez era un actor…A.P.: Sí, he dicho que uno de los retos era interpretar a un actor que puede llegar a ser un mejor actor que uno. Me refiero a las habilidades comunicacionales de Chávez, es verdaderamente sorprendente, era un genio de los medios de comunicación, era un genio del entretenimiento. Sabía perfectamente cómo contactarse con el público. Sus discursos eran totalmente teatrales; con espacios para el canto, para la poesía, para la anécdota, el chiste, el baile. Era un tipo con una memoria prodigiosa, que se sabía muchos corridos llaneros, poemas, frases célebres; que podía mantener una audiencia seis horas sin aburrirla.Era un tipo que podía abandonar el hilo de su discurso e irse hacia su niñez durante 45 minutos y regresar otra vez al punto donde había dejado el discurso. Es innegable que tenía un carisma desbordante. Chávez era un tipo que donde entraba arrasaba. Supo aprovechar lo que tenía y el momento histórico para convertirse en lo que fue. Por eso digo que Chávez era un actor, porque usted revisa ‘Aló Presidente’ y ahí hay un actor pasando por todas las emociones, por todos los ritmos, con un manejo de los tonos y de los tiempos perfectos. Siempre improvisó sus discursos, no necesitaba leerlos. El tipo era un monstruo de la comunicación.Sugerimos: La vida de Hugo Chávez llegará a las pantallas de los colombianosSemana.com: ¿Qué viene para Andrés Parra?A.P.: Viene la segunda parte de un proyecto que yo hice en Chile que se llama Sitiados. Es una historia de ficción basada en la conquista española en América. Mi personaje se llama Juan de Salas y es un tirano, terrible; es un personaje muy bonito de interpretar, actoralmente hablando. Casi al otro día de terminar El Comandante comenzamos con Sitiados. Vamos a estar tres meses en el Tayrona y en Cartagena rodando esta segunda parte que me tiene muy contento.