Dentro de los cultos religiosos, existen distintas figuras a las cuales se les dedica cierta devoción dentro de la sociedad, ya se trate de Dios, o de otros integrantes de estas creencias, como por ejemplo, ángeles o vírgenes.
Estas suelen ser promovidas a partir de ciertos elementos de culto, como escrituras sagradas, siendo la Biblia un ejemplo de esto, o con base en algunos relatos de la vida real, los cuales son capaces de crear devoción y fe por parte de la sociedad.
Un ejemplo de esto, es la Virgen de Guadalupe, con gran popularidad en México, desde el año 1531 aproximadamente, cuando poblaciones indígenas aseguraron el avistamiento de esta en hasta 4 ocasiones, lo que la convirtió en una figura de culto dentro de estos grupos.
Su reconocimiento se ha transmitido hasta territorios incluso mundiales, donde cada vez más personas reconoce a esta imagen como una figura capaz de hacer milagros, y de atraer elementos positivos para el ser humano en su día a día, como por ejemplo pueden ser, la prosperidad, la salud o incluso la fortuna.
La popularidad de esta figura reconocida también reconocida como la ‘Patrona de México’ o la ‘Emperatriz de las Américas’, se ha visto multiplicada a través de todo el mundo, gracias a la telenovela de origen mexicana “La Rosa de Guadalupe”.
¿De donde surge este símbolo?
A partir de esta serie televisiva, se ha relacionado a esta Virgen, con la simbología de una rosa de color blanco, la cual aparece en momentos previos al milagro que caracteriza todas las tramas de este producto televisivo.
Esta relación se ha transmitido a nivel global, sin embargo, es importante analizar los orígenes de dicho significado, el cuál ha sido explicado en varias ocasiones por los productores y creadores de la serie.
De acuerdo a estas explicaciones, el significado principal que se le da a este símbolo, es de pureza, y es una forma de simbolizar la presencia de la Virgen ante estos milagros, e incluso una conexión de esta con sus creyentes.
De esta manera, se puede explicar que se trata de una conexión netamente realizada a partir de la serie televisiva, pero que ha llegado a verse transmitida a todo el mundo, convirtiéndose así en una simbología reconocida.