El Foro Humboldt en Berlín recibió muchas críticas cuando todavía ni siquiera se había inaugurado, también por los costos de construcción que han superados los 680 millones de euros. El museo es el centro de debate sobre piezas de exposición de la época colonial.

Con la apertura de dos nuevos departamentos, el equipo de curadores se esfuerzan por integrar adecuadamente el delicado tema. Se trata de alrededor de 20.000 objetos africanos y asiáticos, que anteriormente se encontraban en el Museo Etnológico y el Museo de Arte Asiático de Berlín-Dahlem. La ceremonia de inauguración fue el miércoles 22 de septiembre de 2021.

¿Habrá restitución?

Según Hermann Parzinger, presidente de la Fundación del Patrimonio Cultural Prusiano, la difícil historia de algunas de las piezas no debe verse como una carga, sino como una “oportunidad real para un nuevo diálogo intercultural”.

El museo está “básicamente listo para restituir piezas”, dijo Parzinger, citando como ejemplo los notorios Bronces de Benin, que serán devueltos a Nigeria, después de una breve exhibición en Berlín el próximo año.

Algunas de los objetos, que se encuentran actualmente en el museo, “podrían desaparecer algún día”, dijo Parzinger. Los museos deberían redefinirse por completo. Aquí parece haberse producido un replanteamiento, ya que el presidente de la fundación solía hablar antes de “circulación de objetos” más que de retorno real.

Museo de Arte Asiático. Foro Humboldt de Berlín. | Foto: Elizabeth Grenier DW

“Transparencia honesta”

El historiador alemán Götz Aly, la curadora ghanesa Nana Oforiatta Ayim y la historiadora de arte francesa Bénédicte Savoy debatieron recientemente en el Festival Internacional de Literatura de Berlín sobre “Descolonizing Worlds: Raub - Beute - Kunst”  (“Descolonizando mundos: Robo - Botín- Arte”).

Bénédicte Savoy, quien renunció a un puesto en el consejo asesor del Foro Humboldt en 2017 como protesta contra el trato de la historia colonial, advirtió sobre la “falsa transparencia” que estaba mostrando el Foro Humboldt como resultado de la presión pública: “Tiene que ser una transparencia honesta”.

Como ejemplo, se refirió al vocabulario eufemístico que se usa en los pequeños paneles explicativos de la exposición, y que describe a los violentos colonialistas en el lenguaje del siglo XIX, como “coleccionistas”.

“Bien documentado, pero a nadie le interesa”

Una de los objetos más impresionantes del Museo Etnológico es un barco de más de 15 metros de largo que fue transportado desde la isla de Luf (actual Papúa Nueva Guinea) a Berlín en 1904. El historiador Götz Aly investigó cómo terminó la embarcación en el museo de Berlín. Él mismo escribió un libro sobre el tema, “Das Prachtboot” (El barco magnifico ).

Fue “increíblemente fácil” encontrar información sobre la influencia de Alemania en la isla, especialmente en comparación con su trabajo anterior sobre la era nazi, cuyos documentos habían sido destruidos en gran parte. “Eso (la historia del barco) fue documentado con precisión y los archivos están todos ahí”, dijo a DW en el festival de literatura de Berlín. “Pero ya a nadie le interesa” criticó.

Máscaras de Oceanía en el Foro Humboldt de Berlín. | Foto: Elizabeth Grenier DW

La investigación de Aly, publicada en mayo, vino como anillo al dedo a los críticos del Foro de Humboldt. El museo a menudo ha sido criticado por no abordar la violenta historia colonial asociada al barco.

Mientras tanto, el Foro Humboldt respondió enviando al cineasta Martin Maden. Este logró encontrar a los descendientes de las personas que construyeron el barco. Debido a que no tienen los medios para mantenerlo y exhibirlo, no lo reclaman, pero sí quieren verlo en Berlín y recuperar así una tradición perdida.

Christine Howald, por su parte, reconoce que “estamos muy abiertos”. El Foro de Humboldt quiere hacer la labor de restitución, no solo cuando una adquisición haya sido hecha en un contexto de injusticia, sino también cuando los objetos sean culturalmente significativos para una sociedad.