Advertencia: Este contenido tiene spoilers de la temporada 7 de Game of Thrones. Si no está al día con la serie, lea bajo su propio riesgo.Quedan pocas horas para el capítulo final de la septima temporada de Game of Thrones y alrededor del mundo crecen las especulaciones sobre lo que pueda suceder este domingo. Un dragon en manos del bando equivocado, dos hermanas en una lucha intestina, el amor naciente entre dos los protagonistas y una serie de eventos que parecen no tener un descenlace obvio. HBO dejó saber esta semana que el titulo de esta final de temporada será "El dragón de temporada". Con esto se aumenta el suspenso por el final de esta saga, al menos por este año. Se sabe que este episodio tendrá una duración de 80 minutos durante los cuales se realizará la ansiada reunión de todas las casas en King’s Landing. Cersei se podrá encontrar con su hermano Tyrion, el zombie podrá llegar a probar la existencia de la amenaza de los white walkers y Daneyris Targaryen se acercará al trono de hierro. Entre las aristas más comentadas se encuentra el papel que podría tener Bran Stark, ahora que tiene ese poder de verlo todo. Hay quienes dicen que será muy díficil superar el penultimo capítulo. Los fans que se han resistido a las constantes filtraciones de la temporada y que han aguardado atrincherados, se han topado cada domingo con escenas cada vez más perturbadoras. El punto más alto sin duda fue hace ocho días.  Ya es una tradición: el penúltimo capítulo de Game of Thrones siempre es el mejor. Baelor, por ejemplo, desencadenó la maldición tras la muerte de Ned Stark y la advertencia de que George R. R. Martín en cualquier momento podría desaparecer al personaje principal.A ese final de la primera temporada le siguieron capítulos inmortales como: Blackwater, The Rains of Castamere, The Watchers on the Wall, The Dance of Dragons y una de las batallas más épicas que hasta ahora había dejado la serie: Battle of the Bastards. Esta vez, no hubo excepción y la serie de nuevo le hizo un tributo a la profecía."La muerte es el enemigo, el primero y el último", le advierte Beric Dondarrion a Jon Snow minutos antes de que el espectro de un oso gigante se abalanzara sobre ellos. Salieron en busca de una prueba reina para demostrar en Desembarco del Rey, que la verdadera guerra se libra en el norte, más allá del muro. Se acabaron los capítulos de las largas travesías. Game of Thrones está a punto de llegar a su fin y eso quedó reflejado en la séptima temporada. No hay tiempo para digerir y entre toma y toma llegan los momentos más esperados y que los directores de la saga venían entregando a cuenta gotas. El fin se asoma. La hazaña de Tormund, Jorah Mormont, Gendry, The Hound Clegane, Thoros de Myr y Dondarrion rápidamente dejó resultados. Después de sobrevivir al oso gigante, el escuadrón se enfrentó a un puñado de White Walkers. Los espectros -excepto de uno- quedaron convertidos en cenizas después de que Jon Snow los enfrentó con la espada de acero valyrio. La misma, que minutos antes intentó devolver a su legítimo heredero. Pero la exploración no quedó ahí. Después de acorralar al espectro que serviría de prueba para volver a Guardaoriente, todo se complicó. Tendido sobre la capa de hielo, el espectro lanzó un abominable grito que atrajo al ejército de muertos. Por segunda vez, en ese instante, Jon Snow se encontró frente a frente con el rey de la noche. De vuelta a Invernalia, Arya cayó en las redes de Littlefinger y tiene una inevitable confrontación con Sansa. La pista que sembró en la pequeña Stark sirvió de chispa para señalar a su hermana por traición. Aunque la joven argumentó haber escrito la carta bajo presión, la respuesta no tuvo eco y terminó acentuando las diferencias entre las dos Stark que no se veían desde la primera temporada. Mientras la relación entre Tyrion y Daenerys se erosiona, por cuenta de una discusión sobre el heredero al trono, nada marcha bien más allá del muro. Con el caminante blanco amarrado y a espaldas de uno de los miembros del escuadrón, intentan huir de la horda de muertos. Las salidas se agotan y terminan atrapados en una isla de piedra en el centro de un lago congelado. Alrededor, el grupo de espectros es atajado por el hielo que se quebró y creó una brecha en el agua.  Después de escapar y correr como loco rumbo a Guardaoriente, Gendry se derrumba en los brazos de Ser Davos Seaworth. "A menos que el señor de la luz nos envíe un poco de fuego" todos estarán muertos, dice antes de enviarle una carta a la mamá de los dragones. En el siguiente plano, como era de esperarse, aparece Daenerys desobedeciendo los consejos de Tyrion y volando rumbo al norte. De alguna forma el escuadrón logró sobrevivir, excepto Thoros de Myr. Aunque seguía atrapados y sin salida, la división en el agua les ayudó a ganar tiempo. Sin embargo, la impaciencia de The Hound Clegane activó una de las batallas más épicas de la historia. Sentado, comenzó a lanzar piedras contra el ejército de caminantes blancos que notaron como las piedras no se sumergían, sino que se deslizaban por la capa de agua que se había vuelto a congelar. Cada espectro se empezó a lanzar de nuevo sobre los guerreros. Comenzó la batalla que en un principio parecía suicida. Eran hombres ágiles, pero frente a un número incalculable de espectros. Estaban cada vez más arrinconados, cuando de repente apareció Daenerys montada sobre Drogon, que de una llamarada, eliminó el primer anillo de espectros. Todo parecía estar bajo control hasta que el rey de la noche tomó un lanza de hielo y la lanzó contra Viseryon. El dragón se desplomó sobre el hielo y fue a dar al fondo del lago. Ese fue el golpe que Daenerys necesitaba para entender lo difícil que va a ser ganar esta guerra. Jon Snow siguió peleando. De repente, el rey de la noche empezó a preparar otro ataque contra un segundo dragón. Aunque el bastardo de los Stark intentó correr para escapar con los demás, tres caminantes blancos se lanzaron sobre él. Daenerys abandonó el lugar y dejó al rey del norte ahogándose en el lago. Minutos después, el tío Benjen apareció a rescatarlo. Lo montó sobre su caballo y lo mandó de vuelta a Eastwatch, mientras él se quedó enfrentando a los espectros.El sacrificio terminó radicalizando la visión de la joven Targaryen que al final del capítulo consiguió que Jon Snow hincara genuinamente su rodilla. El episodio terminó con el ejército de muertos arrastrando las cadenas con las que sacan al dragón muerto fuera del lago. Una vez sobre el hielo, el rey de la noche pone la mano derecha sobre la frente del animal. De repente, un gran ojo azul ocupó el primer plano. ¿Escupirá hielo o fuego?En los anteriores capítulos: Episodio 4x07: ¿Por qué fue tan impactante el cuarto capítulo de Game Of Thrones?Episodio 3x07: El hielo y el fuego por fin juntos en ‘Game of Thrones‘Episodio 2x07: "Stormborn": Reviva el último episodio de ‘Game of Thrones‘Episodio 1x07: En qué quedó ‘Game of Thrones‘ y qué se espera que suceda?