No había pasado ni siquiera un minuto del estreno de la octava temporada de ‘Game of Thrones’ cuando cientos de fanáticos ya habían colapsado las redes sociales con sus reacciones a las primeras escenas del capítulo. Y no era para menos, pues tuvieron que esperar 595 días para volver a ver a sus personajes favoritos en la pantalla. Aunque el primer capítulo no mostró avances significativos, ni los giros inesperados a los que tiene acostumbrados a sus espectadores, esta primera entrega estuvo marcada por algunos de los reencuentros más anhelados y el inicio de pequeños conflictos entre algunos personajes principales. (Si usted es seguidor de la serie y no se lo ha visto, le recomendamos no seguir leyendo). "Winterfell" muestra cómo los Siete Reinos comienzan a alinear sus tableros para disputar la guerra por el trono y la lucha contra los caminantes blancos. La mayoría transcurre en torno a la llegada de Daenerys Targaryen y Jon Snow a Invernalia, pero también deja ver que en Desembarco del Rey Cersei sigue reuniendo fuerzas para la batalla. Vea el especial completo de Game of Thrones aquí La Compañía Dorada y Euron Greyjoy son los principales aliados de Cersei. Pero mientras Euron sueña con poder "sembrar" un hijo en ella para unir la fuerza de esas dos casas, Theon salva a su hermana Yara de sus garras. Tras rescatarla, Theon la reconoce como su reina, pero ésta le da vía libre para que pueda ir a luchar junto a los Stark. Si bien queda en evidencia que los Caminantes Blancos siguen avanzando hacia el norte sin preocupación, el capítulo está dedicado a resolver viejos conflictos y a consolidar nuevas alianzas. Uno de los momentos más emotivos es el reencuentro de los hermanos Stark con Jon Snow: Sansa, Arya y Bran. Algunos de ellos no se veían desde las primeras temporadas y por eso sus encuentros ponen sobre la mesa nuevos conflictos, la mayoría relacionados con la inmocodidad de los Stark por la presencia de Daenerys en Invernalia.
Sansa Stark y Daenerys Targaryen, por ejemplo, se ven por primera vez. Y aunque la primera reconoce a la madre de los dragones como su reina, queda claro que ni ella, ni la mayoría de las familias del norte confían en Daenerys para liderar la guerra contra los caminantes blancos o la lucha por el trono. Pero por ahora no tienen otra opción. Como si esto fuera poco, Sansa se reencuentra con Tyrion. Ambos fueron obligados a casarse en la tercera temporada, pero tras el asesinato del rey Joffrey durante su boda con Margaery, Sansa escapa con Lord Baelish. En este capítulo ambos recuerdan su matrimonio. Sansa le pide perdón por abandonarlo y reconoce que "es el hombre más inteligente" que ha conocido. Tyrion, por su parte, le confiesa que "muchos la subestimaron", pues entre todos los que han muerto, significa mucho que ella sea una de las sobrevivientes. En contexto: Los hechos reales que inspiraron ‘Game of Thrones’ Por otra parte, Arya Stark vuelve a ver a Gendry, el hijo bastardo del rey Robert Baratheon. Ambos se conocieron en el final de la primera temporada cuando Arya trataba de escapar de Desembargo del Rey. En ese entonces Grendy era un herrero y tuvo que huir del pueblo porque Cersei estaba decidida a matar a todos los bastardos de Baratheon. Aunque nunca tuvieron una relación, ambos desarrollaron un vínculo fuerte. En la temporada tres cuando Gendry decide quedarse con la Hermandad, Arya le dice que ella puede ser su familia. Sin embargo, él le responde que "nunca sería así, pues las diferencias de clase siempre los mantendría distanciados. Le podría interesar: ¿Qué pasó en el último capítulo de la anterior temporada de ‘Game of Thrones‘? Uno de los encuentros más agridulces del capítulo es el de Jon Snow y Samwell Tarly, su mejor amigo. Tarly además de contarle con tristeza que la madre de los dragones asesinó a sangre fría a su padre y hermano, es el encargado de confesarle que él es el legítimo heredero del trono."Tu madre es Lyanna stark y tu padre Rhaegar Targaryen, nunca has sido un bastardo", le dice. Aunque esa verdad se reveló en la última temporada, fue uno de los momentos épicos de esta tanda que comienza. Antes de que Jon Snow recibiera la noticia su romance con Daenerys parecía estar mucho más consolidado, por lo que queda la incógnita de si esto afectará o incluso acabará la relación de ambos para siempre. Por un lado, Snow tendrá que decidir si reclama el trono y traiciona a Daenerys y por otro, muchos se preguntan cuál será la reacción de la madre de los dragones al enterarse. “¿Renunciaste a tu corona para salvar tu reino, hará ella lo mismo?”, lo cuestiona Sam. Jon monta por primera vez en un dragón y Tyrion y Varys, sueñan con la posibilidad de unirlos a los dos para que los Siete Reinos por fin tengan unos líderes honestos y dignos.
El capítulo termina con un final inesperado: el reeencuentro entre Jaime Lannister y Bran Stark. Durante una breve conversación con Tarly, Bran dice que está en el patio del castillo esperando a un viejo amigo. Nadie imaginaba que se trataba de Jaime Lannister, quien lo empujó desde lo alto de una torre en la primera temporada. Bran logró sobrevivir, pero no volvió a caminar jamás. Lo último que los fans habían visto en la última temporada era la caída del emblemático Muro y la llegada del Rey de la Noche y sus tropas. En este momento también se reveló que un dragón de Daenerys había sido convertido en zombi. El avance del segundo capítulo deja ver que Jaime arreglará cuentas sobre su pasado porque como dice la conocida frase de la serie "un Lannister siempre paga sus deudas".