En ciertos nichos se le considera una absoluta estrella. Al escuchar lo que hizo con su banda Berri Txarrak y al verlo tocar y propagar la onda de sus composiciones propias, se entiende por qué.

El músico y productor navarro Gorka Urbizu pasó por Bogotá, en el marco de un muy exitoso BIME, en el que entregó un showcase para el recuerdo, acompañado de una banda que sumó a dos hombres, en el bajo y en la batería, y a dos mujeres, en la guitarra y en la batería. En efecto, Gorka tocó con dos baterías en su íntimo y emotivo espectáculo. No sobró ninguna.

Con su conjunto de batería, bajo, guitarra y batería, Gorka Urbizu, sumando el alma con su voz y su guitarra, se presentó en BIME 2024, la noche del 8 de mayo. | Foto: Andrés Alvarado / cortesía BIME

No importó tampoco que se subiera al escenario después de la descarga salsera y energética de La Pambelé, el miércoles 8 de mayo, en el bar La Patrona, donde la orquesta bogotana abrió la noche por lo alto. Y no importó porque, con su música y junto con sus músicos, Urbizu hechizó el recinto en minutos. Su voz y su guitarra ocuparon el espacio con el manto introspectivo y la entrega “minimalista” (de grandes efectos emocionales) que caracterizan la etapa musical que atraviesa.

En esa tónica suenan las canciones que presentó, especialmente de Hasiera Bat, su primer trabajo en solitario. Lo compuso y lo presenta por fuera de Berri Txarrak, la banda con la que a lo largo de dos décadas y media se dio a conocer en Europa, las Américas y el mundo. En el disco sus canciones suenan muy bello. En vivo, demostraron su poder de conmover.

Urbizu canta en euskera, su lengua, una “minoritaria y minorizada”, según nos cuenta. Y nos es ajena a quienes no la hablamos, claro, pero nos recuerda que la letra de una canción es la letra, solo eso. Porque desprovista de sentido literal también es una melodía cargada de intención y poder, una fuerza que opera a nivel subcutáneo, individual, y a la vez resulta democrática.

Al terminar la que fue su corta e intensa gira latinoamericana, que lo vio pasar en pocos días de mayo por México, Colombia, Chile y Argentina (en estos dos últimos países tocó shows acústicos), Gorka encontró tiempo para responder algunas de nuestras preguntas. Esto nos cuenta.

Gorka Urbizu grabando 'Hasiera Bat', disco que presentó en Bogotá y otras ciudades de Latinoamérica. | Foto: Ibai Arrieta

Sobre su disco más reciente, ¿cómo conecta con el (los) anterior(es) y cómo se desmarca de lo que ha hecho antes?

Hasiera Bat es mi debut en solitario, por lo que más que comprararlo con mis proyectos anteriores, lo veo como un paso más en la evolución de mi carrera. Vengo de una banda de rock que giró por medio mundo durante 25 años. Aquí me he despojado de la distorsión e intento transmitir desde otro lugar, a través de un disco que rezuma belleza y crudeza. Busco provocar una sensación de bienestar en el oyente.

Vivir de la música en el siglo XXI, en la era del spotify y el tiktok, pero también de despertares metafísicos, es…

Vivir de la música sigue siendo lamentablemente una excepción, fruto de muchísimo trabajo y alguna que otra carambola de la vida. También puedo decir que es el oficio más maravilloso del mundo, porque uno está en esto para conectar con la gente y hacer sus vidas un poquito mejores al menos por unos instantes, y cuando eso sucede es muy gratificante.

Una fotografía que bien transmite el espíritu de 'Hasiera Bat'. | Foto: Ibai Arrieta

La magia de un concierto pequeño e individual como un showcase Vs. la magia de un concierto masivo con la banda detrás…

Cada cual tiene lo suyo. El chute de adrenalina cuando ves 20.000 personas coreando tus temas es algo difícil de explicar. El silencio casi físico cuando estás tocando solo y consigues transmitir a través de la fragilidad o incluso la vulnerabilidad, también.

Gorka Urbizu y su banda en BIME 2024, conectando a través de la fragilidad y la vulnerabilidad. | Foto: Andrés Alvarado / cortesía BIME

El sueño profesional que cumplió, el sueño que le hace falta por cumplir // La decepción profesional que vivió y la que espera jamás vivir…

Poder compartir mis canciones por todo el mundo y ver que hay gente que se emociona con eso, me sigue pareciendo un pequeño milagro y un misterio enorme. Me siento muy privilegiado y no he tenido demasiadas decepciones fuertes a nivel profesional. Sin audiencia, sin nadie que la escuche, la música muere, y ese es el mayor miedo de un creador, que no haya nadie al otro lado.

Tres canciones para que la gente lo conozca, dimensione su propuesta…

De mi último disco, por ejemplo...

Toki Bat

Janela Bat

Besterik Ez

La importancia de reafirmar la identidad, en euskera en su caso, en la vida y en la música...

Canto en una lengua minoritaria y minorizada, con lo que todo eso conlleva. Uno tiene la sensación de estar jugando con la última cerilla todo el rato y eso lo acaba condicionando todo, pero aquí estamos, resistiendo y aportando nuestro grano de arena para la normalización lingüística, a menudo siendo un grano en el culo de toda la industria y el sistema hegemónico musical. (Y todas las traducciones al castellano de mis letras están en mi web www.gorkaurbizu.eus).

Lo emociona participar en BIME porque…

Porque vuelvo a Colombia, que es un lugar del mundo que me fascina.

¿Extraña algo de la vida en banda?

Se habla de “disco en solitario”, pero obviamente no estoy solo y somos 5 músicos en gira, así que en muchos aspectos no difiere demasiado de experiencias pasadas.

Un mensaje para el público colombiano…

¡Que espero verlos en el directo!

'Hasiera Bat’ (Un comienzo) es el primer disco que Gorka Urbizu firma con su propio nombre. Tras 25 años al frente de Berri Txarrak, navarro apuesta por la belleza y la crudeza, y nos propone un viaje al propio corazón de la canción. | Foto: Ibai Arrieta
"Aquí me he despojado de la distorsión e intento transmitir desde otro lugar, a través de un disco que rezuma belleza y crudeza. Busco provocar una sensación de bienestar en el oyente". | Foto: Martinek Radovan