Más allá de si alguien necesita ‘urgente‘ o no dinero que haya prestado, puede darse la situación en que una persona haya tardado más de lo esperado en hacer su paga o, peor aún, abiertamente se niegue a saldar la cuenta. Ello se convierte en un ‘dolor de cabeza’ para quien al creer en la ‘buena’ voluntad del otro accede a un favor.
En unas situaciones más, quien hizo el préstamo está pasando algún momento de adversidad y la cuantía sería la solución. La tensión surge también cuando se ha reiterado el cobro, pero los intentos no han derivado en resultados concretos, más allá de solicitudes para extender más y más el tiempo de espera.
En ese momento se suele elevar una plegaria a Dios o los santos de mayor devoción para que figuren como intercesores y hagan ser consciente al deudor de no quedar mal a quien le ayudó en tiempos de necesidad. La siguiente oración fue compartida en el sitio web redescofradescieza.
Oración para cobrar las deudas
Querido Dios, hoy vengo ante ti con humildad y confianza para pedirte que me ayudes a
recibir el pago que necesito de manera inmediata. Sé que eres un Dios misericordioso y bondadoso,
y que siempre estás dispuesto a escuchar nuestras peticiones y responderlas.
Te pido que toques el corazón de la persona o empresa que me debe dinero y que les concedas
la voluntad de pagarme sin demora. Confío en que mi petición será escuchada y que pronto
recibiré el pago que necesito para solventar mis compromisos.
También te pido que me ayudes a mantener la calma y la paciencia mientras espero el pago.
Sé que todo tiene su momento perfecto y que tú tienes un plan para mí. Confío en que todo
saldrá bien y que pronto recibiré el dinero que necesito. Gracias, Dios, por escucharme y por estar
siempre a mi lado. Sé que puedo contar contigo en todo momento y que siempre me apoyarás. Amen.