Después de una etapa de oro en los años 70 y 80, Playboy pasa hoy por tiempos difíciles. Suena paradójico, pero para salir de la crisis, la estrategia de la revista de desnudos fue justamente abandonarlos. En dicimebre del año pasado Pamela Anderson se desnudaba por última vez para darle paso a un nuevo formato de revista.

“La idea de la nueva Playboy es llegarles a públicos más jóvenes con un estilo más fresco y natural”, explica Cory Jones, jefe de contenidos de la revista. Las fotografías, ahora, no tendrán retoques y las poses son más espontáneas que antes.

“Hace un año y medio, relanzamos Playboy.com como un sitio web sin restricciones de ingreso, y el tráfico se disparó 400 %”, agregó Jones. “La edad promedio de nuestros visitantes se redujo de 47 años a 30. Comprobamos cómo la marca todavía puede resonar”.

La portada de la nueva edición a primera vista refleja un cambio radical. Sobre un fondo blanco e imitando una imagen de un celular, la joven modelo Sarah Rose Mcdaniel aparenta tomarse un selfie que va acompañado del mensaje ‘heyyy’, al estilo de la aplicación Snapchat. Nada estrafalario, sin voluptuosidad ni demasiados adornos. Por el contrario, la sencillez como prioridad.

Como lo dice un artículo de David Segal en The New York Times: “Por paradójico que parezca, Playboy se ha sometido a una cirugía estética y ha salido de la sala de operaciones con un aspecto más natural”. El nuevo enfoque de la revista busca adaptarse a los gustos y las tendencias de las nuevas generaciones.

Ahora las imágenes, que serán aptas para mayores de 13 años, tendrán un estilo cercano al de las miles de modelos que son populares en Instagram. Con esta estrategia buscan tener presencia en las redes sociales, una espacio clave en los medios de comunicación actuales.

No solo los desnudos clásicos desaparecerán. La frase que describió la revista desde su debut en 1953: “Entretenimiento para los hombres”, no se leerá más en la nueva Playboy, cuyo primer número estará a la venta el próximo 12 de marzo.

Los contenidos de la revista, sin embargo, conservarán el formato de siempre. En la edición de marzo publican, entre otras cosas, una extensa entrevista con la presentadora de MSNBC Rachel Maddow y un ensayo del escritor noruego Karl Ove Knausgaard, quien ha saltado a la fama por su serie autobiográfica de seis novelas Mi lucha. Además, el nuevo número traerá un afiche con una fotografía de la bisnieta de Ernest Hemingway, Dree Hemingway.

La fórmula es arriesgada y aún es difícil saber si tendrá éxito. Más aun al compararla con la fuerza que alguna vez tuvo este imperio: en los años 70 la circulación de la revista alcanzó los 5,6 millones de suscriptores, hoy ronda los 700.000. Pero el cambio no es improvisado; se hizo tras varios años de planeación.

Es bien sabido que quien en términos prácticos dirá que estos mismos contenidos se pueden conseguir en la web en instantes. También que los amantes de las revistas de papel hoy son minoría. Pero la calidad, la innovación y el buen gusto siempre traerán lectores. Y esa es la apuesta que hace ahora la emblemática marca de las conejitas.

Vea un video de Sarah McDaniel, portada de la nueva edición: