Una de las preocupaciones en la que recaen varias personas constantemente suele ser en pensar qué hay después de la muerte corporal, cuya incógnita sigue siendo cuestión de debate debido a que se toman en cuenta distintos parámetros para poder responder a este misterio.
En medio de la era de la información, a través de redes sociales, decenas de personas traen a colación el tema de la muerte a diario, y cada vez más entre la población es común hablar del tema. No obstante, existen varios grupos de estudio destinados a darle una respuesta, más subjetiva que precisa, a este interrogante, siendo la religión un destacado referente.
Basándose en las sagradas escrituras, y su interpretación, el cristianismo expone que luego de la muerte física, el alma de una persona puede dirigirse a tres lugares: al cielo, el purgatorio o el infierno. Siendo el primer lugar el más opcionado parea poder descansar en paz, mientras que entre los dos últimos, la entidad espiritual de una persona no podrá alcanzar la gloria eterna.
Sabiendo esto, los fieles recurren a varias prácticas para arrepentirse de sus pecados, y así poder ser candidatos a heredar el Reino de Dios, como denomina la Iglesia Católica al cielo, sin embargo, cabe la posibilidad que una persona, por una muerte repentina, violenta o por una culpa no perdonada, pueda convertirse en un alma en pena, la cual no gozaría de la presencia de Dios en el más allá.
La oración como acto de fe
Debido a que una de las principales consideraciones de Dios hacia sus fieles, es la que expresa que Él siempre está en búsqueda de la felicidad de sus hijos, la cual pueden encontrar en el Cielo, por medio de su sabiduría ha dado a conocer una oración que puede ayudar a que un alma en pena pueda salir del purgatorio y encaminarse al encuentro eterno con el Señor.
Además de elevar un rosario dedicado a las benditas almas y a las que se encuentran en el infierno y el purgatorio, el portal especializado Fieles a Dios ha divulgado una oración precisa para pedir por las almas en pena, aconsejando la fe, paciencia, devoción y esperanza con la que se debe recitar esta súplica para lograr salvar al alma en cuestión.
- Oración para pedir a Dios por un alma en pena
“Dios Padre Celestial, hoy recurro mis suplicas a ti,
necesito de tu presencia divina para pedir a ti,
Todopoderoso una petición Para que mis seres queridos,
no entren en el purgatorio y sean tomados,
de tus manos camino al cielo.
Perdónale todos sus pecados y recíbelos,
a pesar de sus errores terrenales, perdónalos.
Cúbrelos con tu manto sagrado de misericordia,
y con la mirada noble que te identifica.
Porque tu siempre quieres lo mejor para nosotros,
no seas tan duro en el juicio final.
Te imploro la misericordia por sus almas,
por su espíritu que puedan descansar en paz en todo momento.
Ábrele las puertas de tu Reino Divino te lo imploro por favor,
que sean mucho más felices de lo que fueron,
y padecieron en este mundo carnal sin nobles sentimientos.
Si no se entregaron a Cristo, como tú hubieras querido,
antes de morir te pido perdón y te encomiendo su alma.
Su miedo a morir supero todo lo que tenían,
que hacer antes de ti y lo que incluía creer en ti.
Te imploro tu benevolencia, con sus almas,
fue una persona muy querida y amada para mí.
Te suplico que abras tu corazón,
y le des la oportunidad de reivindicarse,
pues el enemigo quiere y desea su alma en el purgatorio.
Arcángel Gabriel lleva su alma donde pueda,
descansar en paz de esta vida.
Que pueda servir de guerrero en tu ejército de soldados.
Perdona mis pecados y el de todos,
si en algún momento te fallamos,
y traicionamos tu voluntad y lo que,
nos manda a realizar tu palabra.
Gracias Señor por obrar en mis suplicas,
estoy seguro que seré escuchado.
Amén”.