Si algo se suele escuchar es que la vida “no siempre es color de rosa” y esto se refiere a que hay momentos buenos, pero también hay momentos malos y ambos hacen parte del día a día y de lo que significa vivir.
Cuando todo está bien no es el problema, sino cuando todo está mal. Hay veces que por diversas causas todo cambia, lo era bueno se vuelve malo y esto causa situaciones complejas de entender y de afrontar. Puede que se sienta que no se puede lidiar y se piensa en tirar la toalla.
Es aquí cuando, antes de tomar decisiones precipitadas, hay que recordar a Dios y saber que Él siempre está para sus hijos. Por esta razón, pedirle ayuda, calma y protección puede ser lo que se necesita para salir del abismo en el que se ha caído por las razones que sea. Lo importante no es caer, sino levantarse y aprender de cada situación.
Portales especializados en oraciones comparten la siguiente para eliminar ese temor a Dios y pedir por su ayuda:
Oración a Dios para eliminar el temor de pedir ayuda en momentos difíciles
“Amado Dios, en este momento de incertidumbre y temor, me acerco a ti con un corazón humilde y lleno de anhelo.
Tú que eres la fuente de toda fortaleza y consuelo, escucha mis palabras y conoce mis pensamientos más profundos.
En medio de las dificultades que enfrento, te pido que apartes de mí el temor y llenes mi ser con tu paz que sobrepasa todo entendimiento.
Dios compasivo, reconozco mi vulnerabilidad y mi necesidad de tu guía y protección.
Te pido que me rodees con tu amor y que me des la certeza de que estás a mi lado en cada paso que doy.
Ayúdame a recordar que, aunque los desafíos sean grandes, tu poder es mayor y tu gracia es suficiente para sostenerme.
En este momento de oración, te pido que me concedas la fortaleza necesaria para enfrentar las adversidades con valentía y confianza.
Permíteme sentir tu presencia en mi vida de manera tangible, como una luz que disipa la oscuridad y un refugio seguro en medio de la tormenta.
Dios misericordioso, te ruego que me guíes en medio de las decisiones difíciles y que me ayudes a discernir tu voluntad en cada paso que tome.
Permíteme confiar en tu sabiduría y en tu plan para mi vida, incluso cuando las circunstancias parezcan desafiantes y confusas.
Te pido Señor, que me des la humildad para reconocer que no estoy solo en mis luchas y que puedo depositar mis preocupaciones en tus manos amorosas.
Ayúdame a soltar el control y a confiar en que tú tienes el poder de obrar milagros en medio de mis dificultades.
Padre celestial, encomiendo mis miedos y mis necesidades a tu cuidado.
Que esta oración sea un acto de entrega y confianza, sabiendo que estás dispuesto a cargar mis cargas y a brindarme la ayuda que necesito.
Que en cada momento difícil encuentre en ti la fortaleza para perseverar y la paz para descansar.
En el nombre de tu Hijo amado, Jesucristo”.
Amén.