Cuando las personas padecen fuertes enfermedades que afectan el normal funcionamiento del cuerpo o generan dolores insoportables, es muy complicado que los pacientes continúen desarrollando sus vidas de la manera en la que estaban acostumbrados. Estas situaciones suelen estar acompañadas de angustias que invaden la mente de pensamientos negativos.
Luego de ser diagnosticados con fuertes afecciones, algunos individuos deben ser sometidos a tratamientos y procedimientos médicos que no solo los afectan físicamente, por el padecimiento que suponen, sino también de manera psicológica, pues suelen atravesar fuertes episodios de angustia y depresión.
Este tipo de situaciones no altera únicamente la vida del paciente. Sus familiares y círculo cercano se ven obligados a cambiar sus dinámicas de vida en aras de proteger y brindarle los cuidados que la persona enferma necesita. En algunos casos, las afecciones médicas son tan fuertes que los pacientes deben mantener un constante reposo, por consiguiente, abandonan sus trabajos, estudios y responsabilidades en general.
Por esto, creyentes de religiones como el catolicismo y el cristianismo recomiendan algunos grupos de oraciones y salmos escritos específicamente para este tipo de casos, con el fin de ayudar a todas las personas que están pasando por un momento difícil en cuanto a la salud propia o de un familiar o amigo cercano.
Estas palabras para pedirle por la sanación de una persona específica a Dios, han sido pronunciadas por millones de personas alrededor del mundo. Muchas de ellas han confirmado que las enfermedades han desaparecido de sus cuerpos o han disminuido considerablemente los fuertes dolores físicos que estas acarrean.
Para obtener buenos resultados de este tipo de escrituras, es importante realizarlas con fe de que está siendo escuchado por Dios y el Espíritu Santo. De ser así, tendrá noticias positivas sobre sus deseos.
Para tener un momento de conexión con las energías angelicales, se recomienda ubicarse en un lugar solitario que le genere paz y tranquilidad. Puede encenderle una vela blanca a nuestro Señor en símbolo de agradecimiento.
Oración para pedir sanación y guía al señor Jesús
Jesús, hijo de Dios, a ti, que fuiste enviado por el Padre para asumir nuestra debilidad, te pedimos que nos acompañes en este momento de crisis. Salvador misericordioso, ayuda y consuela a los enfermos, para que al recobrar la salud puedan alabarte. Médico divino, acompaña a nuestros proveedores de cuidado para que, al servir con paciencia, puedan sanar debidamente. Fuente de eterna sabiduría, guía a nuestros líderes para que, al buscar remedio, puedan seguir tu luz.
Cristo, el ungido, protégenos en cuerpo y espíritu, para que, al salir ilesos del daño, seamos librados de toda aflicción. Tú, que vives y reinas con Dios Padre, en unidad del Espíritu Santo, un solo Dios verdadero, por los siglos de los siglos. Amén.
Oración por un enfermo grave
Padre, tu palabra nos anima a acercarnos con confianza al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos. Es con esa confianza que vengo ante ti, en este día, para presentarte a mi amigo. Ven, Espíritu Santo, y muestra tu poder en su vida. Solo tú puedes hacer un milagro en este momento. Toca su cuerpo y restaura su salud.
Te pido también que le des sabiduría a los médicos para que logren encontrar un tratamiento eficaz. Es una situación delicada, pero tú tienes el control y la última palabra. Nuestro deseo es verte obrar de forma poderosa, restaurando la salud de nuestro amigo. Tú puedes hacerlo ahora mismo y también puedes usar a los médicos. ¡En ti confiamos para su sanidad física!
Gracias, porque podemos traer nuestras peticiones ante ti, confiando en tu amor, en tu poder y en tu fidelidad en todo momento, Señor. En el nombre de Jesús. Amén.