En la vida de las personas siempre se presentan tentaciones a las cuales no siempre es sencillo escapar por lo que el juego de azar y el dinero fácil se convierten en una de ellas.
En este mismo sentido, hay personas que llegan a los juegos de azar por accidente o por el simple hecho de divertirse y compartir un momento agradable, sin embargo, este es el gancho que tiene la tentación; en un principio todo lo dibuja sencillo y hace que la persona gane y se sienta agradable en el ambiente, pero con el pasar de los días estas conductas de apuestas se convierten en una adicción perjudicial.
Es por eso que las personas buscan ayuda para salir de este vicio una vez caen en él, pero lo que olvidan en algunas oportunidades, es que Dios tiene la salida y que por ello dentro de la religión hay una oración potente que ayuda a alejarse de este vicio.
Oración para alejarse de los juegos de azar
Señor Todopoderoso. Estoy aquí para confesarte mi pecado de adicción a los juegos de… (decir el tipo de juego al que es adicto), estoy aquí para pedirte perdón por dejar que este juego se apodere de mi mente de forma descontrolada.
Perdóname porque he hecho sufrir a muchas personas por tener este vicio. Hoy, pido perdón en mi nombre y en los de mis ancestros por cualquier vicio que se haya tenido en mi línea sanguínea, desde la existencia de mis padres hasta la actualidad. Me imploro por tu perdón y te manifiesto que estoy arrepentido.
Desisto y me opongo a pasar demasiado tiempo pensando en jugar, a pensar en viejas experiencias o en formas de ganar dinero jugando.
Desisto y me opongo a la necesidad de apostar cantidades exorbitantes de dinero para sentirme bien.
Desisto y me opongo a inquietarme por dejar de jugar.
Desisto y me opongo a ver los juegos como una escapatoria para mis problemas.
Desisto y me opongo a apostar grandes cantidades para recuperar el dinero perdido.
Desisto y me opongo a perder a mi matrimonio, familia o seres queridos por mi adicción al juego.
Desisto y me opongo a dejar de trabajar o estudiar por mi adicción al juego.
Desisto y me opongo a necesitar dinero prestado para cubrir el déficit de dinero perdido.
Hoy Cristo romperá mis ataduras y seré libre del vicio de… (decir el tipo de juego al que es adicto). Por el nombre del Padre, Hijo, espíritu Santo. Amén.