Luego de un día agitado, cargado de trabajo, actividad física o con contrastes de emociones, llega la noche, ese espacio en el que muchos quieren descansar, pero que debido al estrés, las preocupaciones o a pensamientos que no dejan desconectar el cerebro, simplemente se hace imposible.
Y es que para intentar conciliar el sueño no solo basta con recostarse, pues hay que llevar la cabeza a un estado en el que se relaje y pueda encontrar la forma de descansar y aunque en ocasiones se pueda lograr dormir algunos minutos, cualquier ruido, por mínimo que sea, hace que las personas se despierten, haciendo imposible volver a profundizarse y trayendo de nuevo a la mente esos pensamientos que impiden descansar.
Para lograrlo, los creyentes han creado una oración para pedir a Dios que los ayude con el objetivo de descansar, pues esto es algo que no solo afecta la recuperación del cuerpo, sino que termina por influir de forma negativa en el trabajo, en las relaciones interpersonal y hasta en el hogar, pues una de las consecuencias de la falta de un descanso reparador es la irritabilidad y los cambios bruscos de ánimo.
Esta es la oración para lograr un buen descanso y un sueño reparador:
“En este día has estado conmigo y por eso te alabo, Señor. Gracias por la seguridad de tu cuidado, tu ayuda y tu compañía. Ayúdame a descansar bien durante toda la noche, toma el control de mi mente para que solo piense en ti. Te entrego mis preocupaciones y mis anhelos. Cuida de todas las personas que amo. Danos tu paz hoy y siempre. En el nombre de Jesús, mi Señor, amén”.
Consejos para dormir bien
La recomendación de los expertos en la materia es que una persona debe dormir, de seguido, entre 6 y 8 horas en la noche, esto con el fin de permitir que el cuerpo se recupera y que la mente se despeje. De hecho, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, entrega algunos consejos que, además de la oración, podrían ayudar a descansar mucho mejor.
Tener horarios de sueño
Es importante establecer un horario de sueño. De acuerdo con la entidad sin ánimo de lucro, las personas deben despertar y acostarse a la misma hora todos los días. Generalmente, las actividades del fin de semana pueden variar y alterar este horario. Para ello, se recomienda que la diferencia de sueño entre el horario regular y los fines de semana no supere una hora.
Alimentación
Los expertos recomiendan comer, máximo, tres horas antes de dormir. Se debe evitar ir a acostarse con hambre o sintiéndose muy lleno. Para el caso de la cena, se recomienda el consumo de comidas livianas y en porciones pequeñas, debido a que la pesadez puede ser un obstáculo para conciliar el sueño.
Respecto al consumo de nicotina, cafeína y alcohol, Mayo Clinic explica que los efectos de estas sustancias demoran mucho tiempo en desaparecer del organismo, afectando el sueño.
Ambiente placentero
Es fundamental crear un espacio ameno para dormir. Este factor influye significativamente para conciliar el sueño. Se aconseja utilizar cortinas oscuras que disminuyan los rayos solares en la habitación. Además, se debe evitar, en lo posible, el uso de pantallas antes de dormir, como el celular, el computador o las tabletas.
No dormir durante el día
En algunas ocasiones, el cansancio y la rutina diaria puede llevar a que muchas personas realicen pequeñas siestas durante el día. Esto puede afectar el sueño nocturno. Mayo Clinic recomienda no dormir más de 30 minutos ni en horas del final de la tarde.
Actividad física
El ejercicio físico tiene múltiples beneficios para la salud del cuerpo humano. Realizar actividad física frecuentemente ayuda a dormir mejor. Cabe resaltar que no se debe realizar en exceso tiempo cercano a la hora de dormir.
Evitar el estrés
Las preocupaciones y los compromisos pendientes pueden ser un problema antes de dormir. Mayo Clinic recomienda utilizar técnicas de meditación para relajarse. “Comienza con los conceptos básicos, como organizarte, establecer prioridades y delegar tareas. La meditación también puede aliviar la ansiedad”, explica la entidad sin ánimo de lucro.