La amistad es sagrada para aquellos que entienden su significado, pues hay personas que no saben cuidarlas, otros que salen lastimados por quienes no valoraron este fuerte vinculo entre dos personas que unen sus vidas.
De acuerdo con la Biblia, la amistad es un regalo de Dios para poder relacionarnos y saber que además de su compañía y de la familia, hay personas que pueden convertirse en hermanos de otra sangre y estar ahí cuando se necesite.
De acuerdo con el portal Biblia On, “un amigo es alguien especial con acceso a áreas de nuestra vida a las que no dejamos entrar a todo el mundo. Sus actitudes nos influyen y a veces terminamos adoptando rasgos de conducta que vemos en ellos. Por eso necesitamos ser sabios al escoger con quién salir y a quién dejar entrar en nuestro mundo. Debemos orar y pedir a Dios que dirija nuestros pasos, que nos guíe hacia gente que comparta nuestro amor por él y nuestro deseo de agradarle”.
En libros como Proverbios hay diversos versículos que hablan de la amistad. Uno de estos “es Hay amigos que llevan a la ruina, y hay amigos más fieles que un hermano”. (18:24).
Portales de oraciones comparten la siguiente para encontrarse con Dios y poder recuperar a ese amigo que se alejó.
Oración para reconciliarse con una amistad
“Señor de los cielos, hoy quiero darte gracias por darme la oportunidad de ponerme en pie una vez más. Quiero ser mejor para Ti y para los míos, quiero agradecerte porque me brindas muchas bendiciones a pesar de lo mucho que puedo fallar.
En esta oportunidad, es mi deseo que pueda ayudarme a poder recuperar esas amistades que se perdieron en el tiempo, por culpa de un malentendido, por culpa del orgullo, por la desdicha. Ayúdame a poder ser quien dé el primer paso para pedir perdón.
Repara los lazos que alguna vez nos unieron y que nos hicieron compartir muchos momentos de felicidad. Soy consciente que muchas veces he sido culpable de la ruptura de éstos, sin embargo, estoy dispuesto a corregir lo que he hecho mal.
Mi buen Señor, pido que puedas derramar la bondad y la misericordia sobre sus corazones para que puedan comprender e interiorizar mis palabras, para que entiendan que quiero hacer las cosas mucho mejor que en un tiempo pasado.
Tú conoces todo de mí, Santo Padre, mis virtudes y principalmente mis errores. Errores que han sido determinantes a la hora de perder la confianza de personas que eran y son importantes para mí. Alivia el remordimiento que siento dentro de mí, no permitas que el enemigo pueda vencer y que termine por desbaratar las buenas relaciones amicales que tuve.
Vuélvenos a unir, mi amoroso Padre, y que esta vez podamos basar nuestra amistad bajo tu amor y tu bondad, para entender que Tú estás por encima de todo. Ayúdanos a ser más transparentes, sencillos y empáticos, a no ser interesado, ni envidiosos, porque esos sentimientos no provienen de Ti.
Que la lealtad, la fuerza, los recuerdos de los momentos compartidos sean los principales pilares que nos lleven a la unión y a la reconciliación. Te pido que bendigas esta amistad para que obtenga de Ti, la fortaleza que requiere para seguir perseverando en la vida, que también es un regalo de Ti.
Aleja al maligno de mi vida y la vida de mis amistades, para que podamos disfrutar nuevamente del apoyo mutuo, de la comprensión y el compañerismo, que nuestras actividades y acciones puedan agradarte y poder ser testimonio de tu existencia en nuestras vidas.
Danos tu sabiduría para saber convivir los unos con los otros sin tener problemas. Devuélvenos esa bendición sagrada que es alegrarse en comunidad. Cuida mi carácter y mi temperamento para que yo no pueda originar ningún mal momento, y si fuera del otro lado, dale a mi corazón la capacidad de perdonar las ofensas y el discernimiento para comprender las dificultades que ellos tengan conmigo”.
Amén.