Dios es el creador de todo y por ello para los fieles es tan importante entregarle todo a él, ya sea cuando las cosas estén saliendo muy bien o cuando se presenten dificultades. Las personas confían y ponen su fe en que si oran desde el corazón, nada les será negado.
Es por ello que esta conversación que se tiene con el altísimo puede servir para contarle sobre situaciones que apremian, como por ejemplo, las finanzas propias y del hogar, pues existen muchas responsabilidades y ante el cumplimiento de estas muchos se agobian.
Cada súplica y pedido que le haga a Dios con fe se puede cumplir, por eso el portal Ministerios Kenneth Copeland comparte estos versículos bíblicos para mejorar las finanzas.
Para las deudas
Proverbios 22:7: «Los ricos son los amos de los pobres; los deudores son esclavos de los prestamistas».
Romanos 13:8: «No tengan deudas con nadie, aparte de la deuda de amarse unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley».
Para las responsabilidades financieras
1 Timoteo 5:8: «porque si alguno no provee para los suyos, y especialmente para los de su casa, niega la fe y es peor que un incrédulo».
Lucas 16:11: «Porque si en el manejo de las riquezas injustas ustedes no son confiables, ¿quién podrá confiarles lo verdadero?».
Proverbios 13:22: «Es bueno dejar herencia a los nietos; las riquezas del pecador las hereda el hombre justo».
Proverbios 21:20: «Riquezas y perfumes hay en la casa del sabio; en la casa del necio solo hay despilfarro».
Para las ofrendas
Lucas 6:38: «Den, y se les dará una medida buena, incluso apretada, remecida y desbordante. Porque con la misma medida con que ustedes midan, serán medidos».
Proverbios 3:9-10: «Honra al Señor con tus bienes y con las primicias de tus cosechas. Tus graneros se saturarán de trigo, y tus lagares rebosarán de vino».
Malaquías 3:8-9: «¿Habrá quien pueda robarle a Dios? ¡Pues ustedes me han robado! Y sin embargo, dicen: “¿Cómo está eso de que te hemos robado?” ¡Pues me han robado en sus diezmos y ofrendas! Malditos sean todos ustedes, porque como nación me han robado. Entreguen completos los diezmos en mi tesorería, y habrá alimento en mi templo. Con esto pueden ponerme a prueba: verán si no les abro las ventanas de los cielos y derramo sobre ustedes abundantes bendiciones. Lo digo yo, el Señor de los ejércitos».
Deuteronomio 16:17: «Cada uno presentará su ofrenda, conforme a la bendición que el Señor tu Dios le haya dado».
La provisión de Dios
Filipenses 4:19: «Así que mi Dios suplirá todo lo que les falte, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús».
Proverbios 10:22: «La bendición del Señor es un tesoro; nunca viene acompañada de tristeza».2 Corintios 9:8: «Y Dios es poderoso como para que abunde en ustedes toda gracia, para que siempre y en toda circunstancia tengan todo lo necesario, y abunde en ustedes toda buena obra».
Jeremías 17:7-8: «Pero bendito el hombre que confía en mí, que soy el Señor, y que en mí pone su confianza. Ese hombre es como un árbol plantado junto a los arroyos; echa sus raíces junto a las corrientes, y no se da cuenta cuando llega el calor; sus hojas siempre están verdes, y en los años de sequía no se marchita ni deja de dar fruto».