Los animales domésticos se han convertido en parte fundamental para los hogares colombianos y de gran parte del mundo, siendo claves dentro del núcleo familiar. Aunque hay personas que prefieren comprar a sus mascotas, otras prefieren darles una segunda oportunidad, adoptándolas o recogiéndolo a aquellos que están en condición de calle.
Sin embargo, el respeto y el amor en muchas ocasiones no se cumple, provocando –intencionalmente o no‐ el maltrato físico a estos animales, sin tener en cuenta que su vida también es importante.
Para nadie es un secreto que el maltrato animal, tipificado en el Código Penal, castiga una serie de conductas en las que se causan lesiones hasta producirle la muerte, se le abandona en ciertas circunstancias o se le maltrata gravemente, incluyendo los actos de carácter sexual. Por ello, las normas protegen su vida y salud, “esto es su integridad física y psíquica”, según información del portal Dexia Abogados.
Por lo anterior, una persona podría tener una pena de prisión de 3 a 18 meses, o multa de 6 a 12 meses, así como una “pena de inhabilitación especial de 1 a 3 años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de animales”, precisó la fuente citada.
Pero, ¿qué dice la Iglesia al respecto? La plataforma ElDiario.es, en diálogo con el sacerdote Robert Culat, párroco de la diócesis francesa de Copenhague, y una de las voces destacadas de la Iglesia Católica a favor del veganismo y la defensa de los animales, reveló que “desde el punto de vista de la enseñanza oficial de la Iglesia, es un pecado maltratar y matar animales sin razón alguna”.
Luego, agregó que, “no es pecado criarlos y matarlos para la comida. La Iglesia todavía considera una razón válida matar animales como alimento para los humanos”.
Por su parte, aclaró que “dada la posición ecológica de la Iglesia, sería coherente cuestionar este punto de vista tradicional”. El sacerdote, en entrevista con la fuente citada, manifestó que “la industria cárnica es muy contaminante y daña gravemente el medio ambiente (por ejemplo, por la deforestación). Y luego porque hoy ya no es necesario comer carne y pescado para vivir saludablemente. Sin embargo, es contrario a la dignidad humana hacer que los animales sufran innecesariamente y desperdiciar sus vidas, usando la fórmula del Catecismo de la Iglesia Católica”.
Por su parte, la Biblia cita en algunos versículos la importancia que tienen las mascotas. En 2 Samuel 12: 3, dice: “No tenía más que una sola corderita, que él había comprado y criado, y que había crecido con él y con sus hijos juntamente, comiendo de su bocado y bebiendo de su vaso, y durmiendo en su seno; y la tenía como a una hija”.